Capitulo 20. Es una buena idea

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─No puedes jugar con Matias ─¿Cuando se detendrán? No jugare con él.

─Suenas igual que Adam, no jugare con él porque no le dare motivos para que le guste o algo por el estilo.

Alexandra me ve fijamente, parece enojada. Si definitivamente se parece a Adam... Angi solía ser mas tranquila. Pero para mi fortuna Alexa no había dejado de seguirme después del fin de semana donde le dije que alguien tenia que detener a Aranza.

─Ya le gustas Alison, y si continuas con tu pequeño plan él saldrá lastimado.

─La única diferencia entre tu y Adam, en cuestión de argumentos, es que tu defiendes a que Matias saldrá lastimado y Adam defiende a que yo saldré lastimada.

Le doy un trago a mi té, no nos encontramos en ninguna cafeteria ya que son las diez de la noche, estamos en mi casa y mi mamá se encuentra en la cocina espero que no nos esté escuchando.

—¿Por que el dijo eso? —Al parecer Adam es el único que piensa de esa manera.

Alexa se encuentra conmigo viendo Once Upon a Time, me encuentro en la penúltima temporada, porque resulta que la última sale Henry de grande. Le pongo en pausa ya que o le presto atención a mi serie o le presto atención a Alexa y no me quiero quedar sin amigas por estar viendo mis series. Aparte de que mi mamá se enojara de que le adelante un par de episodios.

—Porque dice que si continuo con mi juego me terminaré enamorando de Matías —Me río un poco, decirlo en voz alta suena todavía más descabellado—. Cosa que no pasará.

La observo por varios segundos. Alexa abre un poco su bota, pero su mirada se encuentra perdida como si estuviera pensando en algo.

—Por eso Aranza lo quiere —Suelta sin más, pero lo dice susurrando.

—¿Que? —Le preguntó confusa, ¿A que se refería con aquello?

—¿No lo ves? —Niego la cabeza despacio—. No claro que no lo ves, eres Alison. Siempre estás descuidada del mundo, observas y a la vez no.

En eso mi mamá entra a la sala y llega hablando.

—¿Alexa te quedarás a dormir? —Creo que se ha dado cuenta de la hora y mi amiga me voltea a ver, ya se ha quedado anteriormente—. Ya es tarde para que te vayas a tu casa sola.

—Si, ya se ha hecho tarde —Pero pues ella ha decidió a quedarse para interrogarme aún así no dejaré que se vaya sola a esta hora, también tengo instintos de madre—. Quédate, total mañana me llevas a clases.

Alexa tiene un carro pequeño para dos personas. Me empuja un poco un tanto divertida. Pero no bromeo, ¿Por que todo mundo me toma a burla?

—Perfecto —Veo la sonrisa de mi mamá animada—. ¿Gustas algo de cenar?

—Le di palomitas —Le hago señas al bol de palomitas que casi se acaba Alexa, yo casi no comí me dediqué a tomar mi litro de té—, y me di té.

—Estoy bien Gracias señora McNath.

—Claro, si se te ofrece algo no dudes en pedirlo —Se queda callada un par de segundos—. O en tomarlo, sabes que no hay ningún problema.

—Gracias —Y con ello se va mi mamá—. Siempre ha sido muy linda tu mamá.

Me encojo de hombros.

—Siempre vive en su mundo —Y si, lo herede de ella.

—Como tú —Asiento muy animadamente. Creo que soy una réplica pequeña de mi madre.

—Pero si te vas a quedar quiero terminar de ver mi episodio y sin interrupciones —Se lo digo muy serio y creo que mi amiga lo entiende—. Ya después hablaremos del asunto de Matías.

My first love [2]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora