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Jaemin soltó un agudo y doloroso gemido cuando Jeno se adentró completamente en él.

— Tranquila... ya pasará. — La consoló, acomodando su peluca hacia un lado para besarle el hombro, cuello y espalda. — Sé que soy enorme, pero tú eres muy fuerte.

Soltando una sonora carcajada, Jaemin se relajó un poco más.

— ¿Enorme? Maldito presumido, enorme te queda corto.

Jeno con una risita cínica dio una fuerte estocada sacándole un gemido de placer a Jae. Quien repetía en su mente "Es más grande. ES mucho más grande. Seonghwa eres un imbécil". Tal vez le guardaba un poco de récor por haberlo dejado por una maldita y virginal vagina adolescente. "Maldito pedof...".

— S-sí... j-justo a-así... ah...

Las estocadas de Jeno eran fuertes y precisas, dando en el punto dulce de Jaemin. Cuyo punto ni siquiera sabía que existía. Sintiendo a través de su pene, completamente enterrado en el ano de Vicky, la electricidad que atravesó el cuerpo de la "chica", siguió un ritmo constante. Rápido y fuerte. Apretando la pequeña cinturita de sus manos.
Después de eso, seguro quedarían marcas.

El pelinegro no daba más, se sentía tan apretado y caliente. Siempre lo hacía con condón, pero ahora lo odiaba por no permitirle disfrutar con plenitud de esa entradita deliciosa. Se sentía al límite.

Y Jaemin también, una gota de sudor resbalaba por su frente. La presión en su vientre y testículos ya era demasiada, más teniendo al pelinegro machacando su próstata con cada intromisión.

No pudiéndose aguantar más, Jeno dio una última, pero potente estocada liberando todo su semen en el preservativo. Mientras que Jaemin luchaba por que el suyo no manchara su falda, ni el piso, teniéndolo con cuidado en su mano.
Jeno se recostó en la espalda de Jae, sin aplastarlo. Esperó a que sus respiraciones se normalizaran para preguntar. — ¿Vienes seguido? Porque deberíamos repetirlo. — Ante el silencio continuó. — Por favor, veámonos una vez más.

Jaemin en silenció tomó un pedazo de papel higiénico, porque sí había papel higiénico, y prosiguió a limpiar su mano, aún de espaldas al pelinegro que también se arreglaba su ropa. Cuando terminó se dio vuelta dispuesto a irse, pero fue detenido por Jeno.

— Sé que dijimos sin compromiso y eso, pero tomaremos un rato y me darás tu teléfono. Quiero conocer a la chica que me hizo la mejor mamada de mi vida. — Habló arrastrando a Jaemin hacia la barra, pero fueron interrumpidos por una voz chillona, desde el punto de vista de Jeno.

— Ya debamos irnos, te estuve buscando.- Dijo Donghyuck tomando del brazo al peli castaño. — Makku está esperándonos en el coche.

— Se quedará conmigo. — Habló Jeno, afianzando su agarre en la mano de Jae. — La llevaré a casa más tarde.

Hyuck miro al pelinegro y después a su amigo, quien intento soltarse del fuerte agarre en su mano.

— Suéltame, debo irme.

— Prométeme que te veré el próximo sábado. — Pidió.

— No. — Sus miradas se conectaron, pero la de Jae era muy seria. — Suéltame o llamaré a los de seguridad

Jeno la miró suplicante, lo cual Donghyuck notó. — Suéltalo, estará aquí el sábado — Afirmó.

Jeno los dejo ir. Sin darle importancia a que el pequeño amigo de Vicky pidió que "lo dejara ir" no que "LA dejara ir".

***

Si hay algún error, no duden en decirme ^^




Esa linda chica... ➢ NoMin [ADAPTACIÓN]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora