¿Secuestro?

CAPITULO 29- EL OBJETO

Al día siguiente, tal como habían dicho, se dispusieron a revisar el patio y alrededores de la casa para ver si encontraban algo de evidencia sobre lo que sea que merodeaba por ahí.

Ana estaba buscando de un lado de la casa y Cristina del otro, de repente Cristina escucho un grito muy fuerte que la hizo correr hacia allá.

¿Que paso? ¿Estás bien? ¿Viste a alguien? - llegó agitada y haciendo toda clase de preguntas -

Jaja, creo que estoy bien - llevo su mano a su cabeza y la frotó levemente demostrando algo de dolor -

Estúpida me asustas - dió un leve golpe en la cabeza de la más joven y se fue -

Al levantarse y ver a su alrededor para encontrar el objeto que le había pegado en la cabeza, vio a una ardilla en un árbol, mirándola algo raro, la chica se encogió de hombros y camino hacia atrás mirando a la ardilla.

La ardilla la miro unos segundos y luego se fue a recoger la bellota que le lanzó, la chica al ver cómo la ardilla se acercaba comenzó a correr por miedo a que el animal la mordiera y sin darse cuenta se tropezó con algo y nuevamente estaba en el piso.

¿Que carajo? - la chica se levantó al instante está vez y se dió cuenta que había caído por una pequeña pelota que estaba escondida entre unas hojas -

La tomo y la miro detenidamente, era una pelota azul con la imagen de un elefante impresa en ella, la tiro al piso de nuevo y se fue confusa a buscar a su novia.

Ey, bebé, encontré algo del otro lado -le enseño el juguete y levanto una ceja-

¿Y eso? -agarro el objeto y lo vio detenidamente - puede ser de algún cachorro ¿No?

O tal vez es un cachorro humano -respondio la chica exaltada-

No, creo que un niño llegué hasta aquí solo - tiro la pelota y miro el inmenso bosque a su alrededor - le sería complicado

¿Y quién dijo que estaba solo? -recorrio el bosque con su mirada imitando a su pareja-

Basta de asustarme con suposiciones tontas -se frotó las manos y entro a la casa-

Bueno, yo no descarto que alguien ande por ahí -dio un último vistazo a los alrededores naturales y corrió tras su novia-

Una vez dentro de casa, Ana fue hacia el cuarto pues pensaba acostarse, en cambio la mayor no iba tras ella, sino que entro al cuarto del niño.

Al estar dentro analizó el lugar detenidamente con la mirada y se quedó parada en medio de la habitación tratando de recordar si el objeto del patio era ajeno o realmente era procedente de esa misma habitación, tan profunda estaba en su pensamiento que no se dió cuenta cuando la menor entro en la habitación.

¿Salió de aquí cierto? -rompio el silencio de la habitación mirandola-

Eso me temo, pero, si tenemos esa opción en mente, estamos de acuerdo en que no la sacamos nosotras -miro a su pareja preocupada, tomo ligeramente su mano y mirándola a los ojos dijo algo que causaría escalofríos en la contraria - alguien estuvo dentro de la casa

Su chica le apretó fuerte la mano y ambas miraron paranoicas a su alrededor.

Pusieron seguro a cada ventana y puerta que encontraron y aún asustadas fueron a su cuarto.

Ambas tenían la falsa idea de dormir, sin embargo eso no pasó, las chicas acostadas sumidas en la oscuridad de su habitación ambas mentes eran un abismo de ideas y todas ellas provocaban miedo.