🅼i Héroe 無。Kookv

Capítulo 15 : Tilståelse.

Él había demostrado que estaba preocupado y celoso tan fácilmente, JungKook lo demostró tan abiertamente sin dudarlo ni un poco, él siempre demostraba lo que sentía tan fácilmente, su enojo, su alegría, cuando algo lo avergonzaba, todo en JungKook era muy expresivo, desde sus ojos grandes hasta sus labios rosados, incluso su cuerpo era demasiado expresivo, yo debía ser un poco más como él, yo quería ser como él.

«¿Esta era mi tan esperada oportunidad?, ¿La que estuve esperando en todas las vacaciones de invierno?, ¿Finalmente había llegado gracias al mismo JungKook?» caminé detrás de JungKook con pasos firmes, no me permití detenerme hasta estar cerca suyo de nuevo, no vacile cuando lo tome del suéter escolar y jale un poco hacia atrás. «Dilo TaeHyung, está vez dilo» JungKook volteo a verme con sus ojos grandes llenos de brillo, su mirada nuevamente estaba siendo expresiva al mostrarme lo confundido que estaba, «Ya dilo TaeHyung, tienes que ser honesto ahora, por primera vez en tu vida, sé honesto con JungKook...»

—Espera, conejo... —baje la mirada cuando me fue simplemente imposible seguir viendo sus ojos. «¡Si no lo hago ahora, nunca lo haré!, ¡Debo hacerlo!» —Me sentía mal porque cambiaste mucho de repente. —Alce la mirada con los ojos llorosos de la vergüenza y a causa del nudo que sentía en mi garganta. —¿Por qué?, ¿Por qué eres tan apuesto ahora?, ¿Por qué no eres solo un tonto como antes?... —mi barbilla comenzó a temblar al mismo tiempo que las lágrimas descendían por mis mejillas calientes. —Yo, cuando eras un enano de rostro infantil, te decían conejo y no eras popular, todos te rechazaban sin razón alguna, ahora todos se acercan a ti y... —solté un sollozó, me lleve la mano a los ojos y comencé a tallarlos para distraerme un poco de la vergüenza que estaba sintiendo con solo pensar lo que diría a continuación, respire profundo y después solté el aire, seguí hablando: —A mi ya me gustabas desde ese entonces, desde que solo eras un conejo enano... Yo ya te quería...

Era raro decirlo en voz alta, decirlo a alguien que no era Jimin... Finalmente confesarme a él, después de mucho tiempo soportando estos sentimientos... Poder hablarle sin insultarlo era muy raro también, no se sentía como lo usual entre nosotros pero... Me gustó este nuevo sentimiento de liberación, era algo nuevo, algo que se sentía correcto de una manera extraña. «¿Por qué?, ¿Por qué no lo hice antes?» ahora sentía que no importaba lo demás, porque estaba feliz de poder decírselo finalmente.

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