CAPITULO 1

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El día 6 de febrero hace 20 años aparecieron unas extrañas luces en el cielo en un lugar desolado en la tierra prohibida un lugar donde se escucharon hace años atrás varios sonidos de algunas cosas desconocidas pero en fin nadie ah ido a investigar simplemente dicen que es un lugar sagrado en la que nadie puede pisar, ni si quiera mirar , bueno mi pueblo llamado el colmillo de plata estábamos más cerca de ese lugar pero de todos modos quedaba demasiado lejos como a 200km así que de todos modos el que quiera ir se podría hasta perder y nadie sabe el caminó pero bueno nadie le tomo importancia, tenía problemas más importantes que solo admirar aquellas luces como por ejemplo conseguir para mí comida ah Sido un problema sobrevivir soy un herrero a esta edad pero nuca conocí a mis padres tuve que vivir en la calle solo tengo este trabajo y nada más , no tengo casa, no tengo nombre solo me apodan el herrero no es muy bueno pero es todo lo que tengo por el momento , solo ganó 20 monedas de oro por cada petición que me hacen así que no me puedo quejar ya que puedo poner excusa de que trabajo hasta tarde y puedo quedarme a dormir aquí es acogedor dormir y para calentarme puedo usar el horno pero cuando no me puedo quedar aquí simplemente salgo de la herrería y me voy a dormir a la taberna que me cuesta 10 monedas de oro unos tres días pero bueno, era un día cualquiera en la herrería esperando a que alguien entre hasta que en unos momentos entra una mujer muy extraña con una bolsa de piel

Mujer: disculpe señor herrero usted puede reparar está espada *saco una espada normal pero una punta era de color negro*

-*miro aquella espada con esa punta extraña veía que la espada no estaba en mal estado y de echo la punta no coincidía* si la puedo reparar , puede recogerla para hoy en la tarde , a nombre de quien la pongo

Mujer: *me quedo callada mirándolo hasta que digo algo* no hace falta ponerlo a nombre de alguien , yo esperaré a que esté terminada

No entendía por qué aquella mujer escondía su nombre pero bueno no me puedo quejar , yo no tengo nombre y tal vez sea como yo pero bueno es trabajo no me quedaré la petición de un cliente es mi prioridad , tome primero la parte de la espada mirándola y después tome la punta negra y sentí algo extraño , en mi mente paso imagines de muchas estatuas destrozadas y me pongo a temblar sudando soltando la punta , era extraño tal vez el calor me está afectando pero bueno solo trate de disimular

-señora puede quedarse a ver si gusta pero si aguanta el calor y no es recomendable para una mujer tanta temperatura

Mujer:*lo miro viendo el sudor y veo como está temblando sónriendo* se que usted puede reparar está arma y tranquilo le daré el doble si me la da a entregar en esta dirección

Miro la dirección de la señora que después se va era en el bosque , me había dado un mapa donde se encontraba una cabaña como puedo representar pero no me puedo quejar es más dinero son 40 monedas eso me hacía feliz así que tome mis herramientas y fui al horno y el yunque a reparar está extraña arma

Continuara

el noble caminoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora