El monstruo II

IV

La hora llega. Dejo a Sam en su casa y paso por Ali. Ella está demasiado habladora por lo que opto por poner la música bien alta y dejar que ella hable todo lo que quiera. Pero al poner el reproductor aleatorio de activa Berzerk de Eminem y eso la anima mucho más. Se pone a gritar y decir cosas como "¡Uh, fiesta!" y "¡Sí, esta noche es la noche!". Ruedo los ojos y aparco el coche en casa.

Saludamos a mamá y a papá. Drake se encierra en su cuarto y Ali y yo en el mío mientras nos arreglamos. Opto por falda negra alta y crop top igual de negro por el ombligo. Converses negras, maquillaje y poco más. Pese al cabreo que llevo encima me veo guapa. Más de lo normal y sin saber del todo porqué.

Ni si quiera cojo la chaqueta. Móvil por si acaso y llaves. No necesito mucho más. Salgo de casa mientras Ali me explica los nuevos rumores de Lauren y Aby.

-Deja de hablar de esas dos, no me importa una mierda- digo borde. Tengo frío. Necesito alcohol.

-Uy chica, que arisca estás esta noche- dice ella –Ni que te hubieran dado calabazas en una cita- como no, mi mejor amiga acierta.

-Cállate- escupo, y llegamos a Midnight.

La cola no es demasiado larga y nos aposentamos en este mientras ella me interroga. Es demasiado cotilla y yo estoy demasiado irascible.

-Pero tía, ¿qué te pasa? Últimamente andas más rara de lo normal- murmura ella.

-Alli, no quiero hablar del tema ¿Sí?- le digo.

Suspira y ambas esperamos pacientes en un incómodo silencio mientras se oyen las conversaciones de la gente que hay delante nuestro, de la que hay detrás y de la música de dentro.

-Vale- digo –Sí, has acertado, me han dejado plantada- no la miro.

-¿Qué?- dice ella sin entender.

-Había quedado con alguien para cenar y me ha dejado sola- digo.

-¿¡Con quién!?- dice emocionada.

-¿Qué más da eso ahora? He venido para olvidarme y pasármelo bien, no para estar acordándome toda la noche- digo.

-Cierto- dice ella –Hablaremos de esto más tarde- me dice y me da un mini abrazo.

Le sonrío y nos introducimos en el local con una pulsera de paso de toda la noche. Nos dirigimos a la barra y tras el segundo vaso de tubo vacío la cosa se empieza a animar. Me invitan a otro, me compro otro más, el guapísimo camarero nos invita a mí y a Ali a un par de chupitos para cada una y consigo otro vaso más gratuitamente.

Todo esto transcurre en ¿Dos hora tal vez? Mi cuerpo reniega cualquier bebida pero no dejo de pedir más a cualquiera que se me acerca.

Alli está mucho más sobria que yo porque no deja de regañarme. Una alegría interior me recorre el interior del cuerpo y la vergüenza desaparece totalmente cuando empieza a sonar Bad. Chillo y me alejo hacia la pista a toda prisa. Alli me dice algo que no entiendo demasiado.

Me muevo como loca mientras río, me he venido arriba, lo sé, soy consciente. Aunque bueno, ahora mismo, no soy demasiado consciente de nada en cuestión. La música está altísima, las luces parpadean, y yo me muevo, me muevo mucho. Diviso a Alex mirándome desde abajo. Me he subido en una tarima y no se ni cuando lo he hecho. Estoy bailando con una chica que parece igual de ida que yo. Ambas nos reímos y chocamos manos.

Casi me caigo de la tarima por culpa de un estirón de pelo ¿Qué coño? Me giro y diviso a Lauren sonriendo con inocencia fingida desde el suelo. Llevo toda mi vida con ganas y ahora es el momento.

-Maldita guarra- y me tiro sobre ella desde las alturas de la tarima.

Su cabeza impacta contra el suelo y se que se ha hecho mucho, mucho daño. Pero eso no parece pararle para intentar seguir haciéndome daño. Lo cierto es que no debe de haberme echo mucho, por que no me duele nada. Le pego una bofetada en la cara y me agarra los brazos desde abajo. Le clavo las uñas en las manos tan fuerte como puedo. Me suelta y aúlla. Aprovecho eso para darle de nuevo y recurrir al tipiquísimo tirón de pelos. Pero creo que tiro demasiado fuerte porque me quedo con varios pelos pegados a mi mano.