𝚆𝚘𝚖𝚊𝚗 𝚇 / 𝑺𝒕𝒆𝒗𝒆 𝑹𝒐𝒈𝒆𝒓𝒔

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Malia se quedó despierta hasta muy tarde en su habitación, leyendo uno de los libros de Charles y escucho los pasos de Erik al entrar a su habitación; había algo en ese hombre que le causaba curiosidad en ella pero aún no podía descubrir que era con exactitud.

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A la mañana siguiente, Charles y Mal se reunieron en la oficina del agente o más bien, el jefe de las instalaciones. Ninguno dijo nada respecto a la situación de la noche anterior, solo se brindaron un par de miradas para luego poner su visar en el gran satélite que se podía apreciar a lo lejos a través de la ventana.

- Hank convirtió esa instalación de radar en un transmisor- explico el agente - está diseñado para amplificar las ondas cerebrales-

- Eso podría amplificar los poderes telepáticos de Charles - comento Malia captando la atención del resto - No es así?- pregunto dirigiéndose al agente-

- Exactamente- respondió con una sonrisa de labios - por lo que ayudaría a buscar más mutantes para la misión -

- y si no quieren que los encuentren?- pregunto Erik apareciendo en el marco de la puerta -

- Erik...- dijo Charles al verlo - decidiste quedarte - continúo con una sonrisa de felicidad -

Mientras Charles desbordaba de felicidad como un niño con juguete nuevo, Erik y Malia compartieron una mirada que solo ellos entendían lo que transmitían.

- Si una nueva especie está a punto de descubrirse, debe hacerlo alguien igual a ellos - hablo Erik con seriedad dirigiéndose al agente - Ellos y yo buscaremos a los mutantes, sin ustedes -

- En primer lugar, esa es mi máquina - respondió el agente señalando el radar afuera - y segundo, esa es decisión de Charles y a él no le molesta la presencia de la CIA-

- Está seguro de eso?- pregunto Malia con una sonrisa de la lado - Tu que dices, Charles?- pregunto mirándolo -

- Lo siento, pero...apoyo a Erik - respondió Charles compartiendo una mirada con el nombrado -

- Ya oyó - dijo Mal poniéndose de pie - los buscaremos solos - sentenció para luego retirarse de la oficina-

- Tiene carácter- comento Charles luego de que ella se fuera -

- Qué sucede si me reuso a sus condiciones?- pregunto el agente captando la atención de Charles -

- Entonces usará sus instalaciones sin mi - respondió Charles antes de retirarse-

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Charles, Erik, Raven y Malia, fueron guiados por Hank hasta el radar a las afueras de las instalaciones.

- Lo llamo Cerebro- dijo Hank una vez que entraron-

- En serio?- pregunto Malia aguantando la risa -

- Es que tiene forma de cerebro- respondió apenado Hank -

- Si - afirmó Charles- es...ingenioso -

- Cómo funciona?- pregunto Raven curiosa -

- Los electrodos conectaran a Charles con el transmisor del techo - comenzó a explicar Hank - Cuando el calor algún mutante, su cerebro enviara una señal directa y las coordenadas de su ubicación se imprimen aquí - señaló unas computadoras -

- Impresionante- dijo Malia asombrada - tú lo diseñaste?- pregunto -

- Si...- respondió Hank -

Malia noto las miradas bobas que se regalaban Hank y Raven, por lo que no quiso hacer de aguja en su burbuja de amor.

Mientras ella se acercaba al otro par, se dió cuenta de que Charles ya se estaba colocando el casco.

- Que adorable rata de laboratorio- bromeó Erik -

- No lo eches a perder Erik - lo regaño Charles -

- Eh sido rata también- continúo Erik -

- Alguien que se expone a estas cosas para salvar a los demás, no debería considerase tan miserable como una rata de laboratorio- se unió Malia a la charla usando un tono más serio y molesto de lo habitual-

Erik y Charles compartieron miradas ante la actitud que tuvo la muchacha pero ninguno dijo nada al respecto. Malia, Erik y Raven se hicieron a un lado para que Hank pudiera explicarle su trabajo a Charles.

- Ya está - dijo Hank tocando algunos botones en el casco - no te puedo afeitar la cabeza?- pregunto en un susurro -

- No toques mi cabello - le advirtió Charles -

- Está bien - respondió Hank -

Hank comenzó a activar todo en su maquinaría y el casco en Charles comenzó a hacer efecto; todos a su alrededor lo miraban con mucha atención y curiosidad. El telépata se sostuvo con ambas manos sobre la barandilla a su alrededor y sonreía con mucha felicidad, al parecer si estaba yendo de acuerdo al plan.

- Funciona!- grito de emoción Hank -

Charles podía ver a todo mutante y persona ordinaria que habitaba en la tierra, a un cierto radio de distancia.

- Los tengo - dijo Charles una vez que se sacó el casco de la cabeza-

- Vayan por sus cosas, nos vamos en 20 minutos - informo Malia antes de salir -

- Por qué están borde con nosotros?- pregunto Raven -

- A pasado por mucho - respondió Charles sin quitar la mirada de dónde se había ido la muchacha- tiene la capacidad de curar cualquier herida física pero las del alma...eso as algo que nadie puede sanar, ni siquiera el tiempo -

***

Raven se había quedado con aquella duda que no la debajo descansar, por qué alguien tan perfecta como ella, estaba tan sola en la vida; camino hasta su habitación y se quedó parada frente a la puerta, sin saber que hacer.

Después de esa orden, Malia se dirigió a su habitación para guardar algo de ropa en su bolso; cuando ya casi estaba lista, se tipo con aquel expediente que tanto la inquietaba, se quedó estática viendolo hasta que un sonido del otro lado de la puerta puso en alerta todos sus sentidos.

Camino hacia la puerta y la abrió de un solo tirón, era Raven, quien tenía su mano levantada lista para tocar; ambas se quedaron en silencio, viéndose una a la otra, hasta que Mal se hizo a un lado para que ella pasará.

- Pasa - dijo sería y Raven hizo caso a su petición-

- Lo siento, yo...- Raven interrumpió su disculpa al ver un extraño expediente sobre la cama de la joven - Qué es esto?- pregunto al tomarlo en sus manos -

- Nada de tu incumbencia- respondió borde Malia sacando la carpeta de sus manos - Qué quieres?-

- Qué te sucede?- pregunto molesta Raven - Cuando te conocí eras simpática y divertida, pero ahora...es como su fueras una persona totalmente diferente-

Malia se quedó en silencio ante ese planteo, no sabía que responder, una parte de ella se alegraba en tener nuevas amistades y un propósito por el cual luchar, pero la otra...tenía miedo de seguir sufriendo, de perder a más personas en su vida.

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