𝚆𝚘𝚖𝚊𝚗 𝚇 / 𝑺𝒕𝒆𝒗𝒆 𝑹𝒐𝒈𝒆𝒓𝒔

21

***

El sol brillaba como cada tarde de verano, el sonido de los pájaros cantando y la brisa cálida, no eran ideales en las circunstancias que se estaba viviendo.

Malia, acompañada de su familia, se encontraban de pie frente a las lapidas de personas que alguna vez fueron grandes figuras en el mundo.

- Siendo honesta, creí que jamás regresaría a este lugar... - comenzó hablando Malia, quién se encontraba frente a las personas -

Los vengadores, sus hijos y varios agentes de Shiled, asistieron al funeral del hombre Erick Leshner o mejor conocido como Magneto.

- Esta escuela, estas personas... - abrió sus brazos haciendo referencia a las piedras de mármol que llevaban el nombre de los XMen - Se que ustedes no entenderán lo es que es ser parte de esto, porque ser un mutante es ser...único -

Como si de un acto reflejo se tratase, la mirada de la rubia se dirigía a la tumba dónde yasia Raven.

- "Mutante y orgulloso" - recito la célebre frase de su amiga azul - Es algo que llevamos tatuado en el corazón - sonrió al recordarlo - A todo aquel que llegaba a esta escuela, buscaba protección y un nuevo comienzo, dejando su antigua vida atrás...Estos nombres, no son para lucirnos como héroes. Son para representar lo que somos en realidad - señaló las placas - Y sin Erik, Charles, Raven, Hank, Alex y muchos de nosotros...todo esto, no sería posible -

La ceremonia no duró más de veinte o treinta minutos más, cuando las personas comenzaron a dispersarse.

***

- Lamento que hayan perdido su primer día de entrenamiento como equipo - dijo Mal caminando junto a los gemelos y sus hijos, a paso lento por el enorme jardín -

- No tienes que disculparte por nada - contradijo Wanda - Nada de esto es tú culpa -

- Además, madrugar no es lo mío - bromeó Thomas haciendo reír un poco a su madre -

- Por qué nunca nos presentaste al señor Leshner? - pregunto Oliver con curiosidad -

- De hecho, lo conocieron - respondió Malia para sopresa de todos - Eran unos bebés, no lo recordarían - explico brevemente -

- Lo visitabas?...Últimamente - indagó Thea -

- Muy pocas veces - respondió con la mirada triste - Hace algunos años me pidió que ya no lo hiciera, prefería que en mi mente se quedará el Erick que alguna vez fue en el pasado... -

- Pero no le hiciste caso - río Issac contagiando a Mal -

- No, claro que no - río por lo bajo -

Frenaron sus pasos en frente de la puerta principal, la cual llevaba un enorme candado.

La escuela estaba intacta, excepto por las plantas que la cubrían. Al parecer estos últimos años, la naturaleza había ganado terreno sobre todo el lugar.

- Necesita algo de mantenimiento - comento Pietro mirando el enorme edificio -

- No siempre se vio así - dijo Malia haciendo una mueca - Me hubiera gustado que la conocieran en su mejor época -

- Quién es dueño de todo esto, mamá? - pregunto Thea -

La coyote solo sonrió divertida y camino hacia la entrada, saco el cerrojo y abriendo las puertas de par en par.

- Pero, cómo...? - balbuceó Tommy sin comprender lo que acababa de pasar -

- Qué sucede? - Steve y Tony hicieron acto de presencia observando el interior del edificio -

- Thomas, qué hiciste ahora? - lo regaño Tony mirando al nombrado -

- Y por qué yo? - pregunto ofendido señalándose a si mismo -

- La pregunta es, por qué no? -

- Malia lo hizo - intervino Wanda - Ella abrió las puertas -

Los hombres se miraron entre ellos y se introdujeron en la escuela, siendo seguidos por los más jóvenes.

***

Caminaron algo desorientados por el lugar hasta que dieron con Malia, en la planta alta.

- Aquí estás - dijo Tony casi a modo de reclamo - Deberían hacer un mapa de este lugar - se quejo -

Malia no respondió nada, solo siguió en lo suyo; la yema de sus dedos acariaba las oscuras maderas que cubrían las paredes, mientras que miles de recuerdos embargaban su mente.

- Qué le sucede? - pregunto Issac en un susurro, tomando la mano de su padre -

- Está... -

- Recordando viejos momentos - lo interrumpió Wanda sin quitar la mirada de la coyote -

- Ya lo hablamos, leer la mente de los demás no es correcto - la regaño Steve como si fuera una niña pequeña -

- Quieren callarse? - dijo Pietro molesto - Parecen unos niños -

Wanda y Steve se miraron entre sí para luego desviar la vista hacia el sokoviano, con una expresión de molestia.

- Oigan - llamo su atención Malia - Vengan conmigo -

Todos la siguieron a través de los largos pasillos, hasta llegar a una enorme puerta de metal con una "X" en medio.

- Y esto? - pregunto Steve -

- Esto... - Malia abrió la puerta colocando su mano en el detector de huellas - Es XMen... - agrego al momento que un enorme hangar se hizo presente frente a los ojos de todos -

Supersónico estaba allí, al igual que los juguetes de Hank y las enormes vitrinas con los trajes de cada uno de los XMen; eso era algo nuevo para Mal, ya que fue una de las últimas cosas que hizo Tormenta antes de morir.

- Primera generación - leyó Thea en voz alta, donde se encontraban los viejos trajes amarillos de los fundadores del equipo -

- Y por esa razón es que yo diseño los trajes - bromeó Tony haciendo referencia a la mala combinación -

- En nuestra defensa, no tuvimos tiempo de crear algo mejor - dijo Malia -

- Mamá... - la voz de Oliver hizo que todos se dirigeron hacia donde se encontraba topandose con cinco cuadros de gran tamaño, colgados en la pared -

- Esa eres tú - la señaló Issac - Y los otros? -

- Erick, Charles, Hank y Raven - respondió sin quitar la mirada de las fotos - Mis viejos amigos -

Mal continúo mostrándoles la escuela y contándoles miles de historias sobre los XMen, pero al final del día... seguían siendo parte del pasado y todas aquellas personas que alguna vez le dieron vida al lugar, ya no estaban con ella.

***