𝚆𝚘𝚖𝚊𝚗 𝚇 / 𝑺𝒕𝒆𝒗𝒆 𝑹𝒐𝒈𝒆𝒓𝒔

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Malia viajo a California para poder localizar la manada y después de un par de investigaciones, logro localizarla en un pequeño pueblo llamado Beacon Hills.

Era un día gris y húmedo, las calles estaban casi desiertas, las personas poco amigables y un extraño aroma en el aire.

Dejo su valija en el hotel dónde se hospedaría unos días y salió a recorrer el lugar. Sin darse cuenta comenzó a adentrárce en el bosque, camino varios metros hasta que unos pasos ligeros detrás de ella la pusieron alerta.

- Corre!- grito un muchacho pelinegro -

Tomo la mano de Malia, al ver que ella no reaccionaba, y siguió su corrida con ella a rastras.

- Qué sucede?!- pregunto Malia sacada de foco por la situación-

No obtuvo respuesta alguna por parte del jóven pero si consiguió que una bala impactara en su hombro izquierdo, demasiado cerca del corazón.

Calló al suelo de rodillas y luego dejo que todo su cuerpo se desplomara en el suelo. La vista comenzó a fallarle, tornándose borrosa. Su último recuerdo fue ver aquel joven misterioso acercarse a ella, bastante preocupado.

***

Se encontraba en un bosque, cubierto de nieve, rodeada de árboles enormes y un silencio sondercesdor.

Aunque se sintiera confundida por la situación, tenía la sensación de conocer el lugar, de alguna ves haber estado allí.

- Malia...- una voz masculina resonó en sus oídos, como si fuera un susurro - Malia...- parecía llamarla pero cada vez se oía más lejos -

Comenzó a caminar, persiguiéndo el origen de aquella voz, hasta empezó a apretar el paso y cuando menos se dió cuenta ya estaba corriendo.

Freno en seco al verlos, Steve y Bucky, ambos parados frente a ella, con una distancia de escasos metros.

- Qué...?- balbuceo, apenas moviendo los labios -

Aquellas personas, que tanto la atormentaban en sus sueños, no respondieron nada, solo se dieron media vuelta y comenzaron a caminar en sentido contrario.

- Alto!- grito Malia, quiso correr hacia ellos pero sus piernas no respondían a sus órdenes- Esperen!- volvió a gritar y seguía sin moverse, los pies parecían estar clavados en la nieve-

Las figuras cada vez se volvían más borrosas debido a la distancia. Malia gritaba y luchaba por liberarse para poder correr tras ellos.

- No...- sollozos rendida y cayó de rodillas en la fría nieve - No me dejen...no de nuevo - pidió entre sollozos, cerró sus ojos con fuerza y dejó caer sus manos para sostener su cuerpo- porfavor ...-

Las lágrimas brotaban con locura y el vacío en su pecho crecía a cada segundo. Podía jurar que estuvo en ese lugar por mil años, sintiendo ese dolor insufrible y la sensación de desesperanza apoderándose de su corazón roto.

***

Despertó de golpe, con la respiración agitada y todo su cuerpo sudoroso. Trago en seco y cerró sus ojos con fuerza, convenciéndose a si misma de que solo había sido una pesadilla.

Miro todo a su alrededor, estaba dentro de una habitación, miro sus ropas y noto que llevaba un vestido blanco de tiras.

Tocó su hombro, dónde había entrando la bala y para su sorpresa encontró una cicatriz. Bajo de la cama, provocando que sus pies hicieran contacto con el frío suelo del lugar.

Salió del cuarto y camino por lo pasillos de la casa. Escucho unas voces provenientes de la sala y bajo las escaleras, despacio para no alarmar a nadie.

Varios pares de ojos se posaron en ella. Era un numeroso grupo de personas, de todas las edades y al parecer nadie se esperaban que aquella mujer misteriosa del bosque pudiera recuperarse tan rápido, luego de recibir una cantidad importante de Wolfbein.

- Alguién sería tan amable de decirme qué está pasando?- pregunto Malia luego de una larga e incómoda brecha de silencio-

- Mi nombre es Talia Hale- se presentó una hermosa mujer pelinegra - Y él es mi primo, Lucas Hale -

- Hola- saludo Lucas, el mismo joven que la salvó en el bosque - Espero que mi primera impresión no te haya espantando - río nervioso -

- Lucas te salvó la vida al traerte aquí luego de que esos cazadores los atacarán - hablo un hombre de cabello castaño y ojos verdes - Soy Joseph Hale - sonrió amable -

- Cómo te llamas, cariño?- pregunto una mujer pelirroja de no más de treinta -

- Soy Malia Logan - respondió sería observando a todos - Y...Gracias- miro a Lucas - por salvarme -

- Descuida- sonrió Lucas- debemos cuidarnos entre nosotros-

- Algo me dice que no eres de por aquí - dijo Talia acercándose a ella - Qué te trae a un lugar como esté?- indagó -

- Ustedes - respondió Malia - Vine buscando la Manda Hale y al parecer ustedes me encontraron antes -

Los presentes se miraron entre ellos y luego posaron la vista en la mujer coyote parada en frente.

***

Luego de una larga charla en dónde Malia les contará sobre quién había sido su madre y el porque de su viaje, Talia se ofreció para ayudarla a conocer mejor sobre sus raíces.

Al principio les costó creerle sobre su otra mitad, su mitad mutante, pero luego de buscar en el libro familiar pudieron comprobar la verdad. Al parecer ese libro tenía registro de todos antepasados de la familia y cómo era de esperarse, James Logan estaba en él, debido a que se involucró con una Hale.

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