Viahn se encontraba viendo los ojos verdes del Ministro de Defensa y Seguridad de Volkov, un reptil que parecía leerle el pensamiento a medida observaba sus oscuros ojos, y lo que vió en el rostro del insufrible y guapo hombre no le gustó, parecía que había descubierto su secreto.
Su secreto o tal vez todos ellos estaban ahora en manos del odioso Reptil que no podía dejar de ver.
La hermosa Luna de la manada Holland Volkova se había presentado como Holly una Omega muy amable y bondadosa, y ella no podría seguirle mintiendo, si es que ella no había leído ya su pensamiento. Porque sabía que Luna leería su corazón en la más mínima oportunidad.
— Y-Yo de repente tengo que irme ya. Eh ha sido un placer, Alpha, Luna. — Viahn aún podía sentir el dolor en su tobillo, pero lo ignoraba por completo sobre todo ahora que de verdad podía meterse en un aprieto por ser tan descuidada.
Porque eran ellos las autoridades de las que se estaba escondiendo, y no quería más problemas de los que se metería.
— Parece que es más grave de lo que pensé. — Habló Yulian que aún no se había ido. — Te aconsejo que uses muletas durante una semana máximo para que puedas recuperarte pronto. —
— ¿Tienes quién venga a traerte? ¿Quieres que vaya a dejarte a casa? — Preguntó Holly preocupada. La Omega negó de inmediato.
— Está bien, llamaré algún taxi y... —
— No, por supuesto que no, iré a dejarte, después de todo ha sido mi culpa y... —
— Luna, la Reunión con los Ministros también requiere de su participación. — Le interrumpió la Beta a Luna, antes que esta se comprometa.
— ¿Puedes llevarla Yulian? — Le preguntó entonces Holly, a lo que él de inmediato asintió.
— Por supuesto, voy al hospital del Centro ¿Estás de camino? —
Viahn ni siquiera sabía cuál era el nombre de la Avenida en la que se ubicaba su hotel, tenía muy mala orientación y dos pies izquierdos, pero también recordó que habían caminado a la izquierda de una enorme Biblioteca Central, lo recordaba porque fotografío la enorme estatua de Águila en la plaza de enfrente.
— Aún no me sé los nombres de las calles, pero está cerca de una Biblioteca frente a una plaza con una Águila. — Yulian sonrió de inmediato.
— El hospital queda a doce cuadras de esa plaza. Esta cerca, te llevaré. — Asintió el guapo doctor Omega de ojos grises.
— O-Okay, muchas gracias a ustedes también por todo. —
Viahn decidió que salir de ahí lo más rápido era lo mejor, temía por su vida y por sus papeles de visitante también, si alguien se enteraba que estaba lejos de su grupo de excursión la expulsarían sin posibilidad de un reingreso a la manada.
Cameron observaba como la pequeña Omega intentaba caminar a duras penas con la ayuda del doctor fuera de la enorme residencia. Y de alguna forma le hubiera agradado llevarla a a su casa, para asegurarse de que estuviera bien, después de todo ¿Era eso, no? Él era el Ministro de Defensa y Seguridad, debía estar cuidando de ese rostro angelical, y lindo trasero voluptuoso.
— ¿Vas a estar en la Reunión? —
La voz de Dmitry lo sacó de su ensoñación, o más bien de la vista del cabello castaño de la Omega que se alejaba con el doctor, le arrancaría las manos a ese doctor por tocarla si pudiera, pero no es como si él no estuviera marcado por una Alpha ya, así que no debía ni siquiera sentir...
¿Sentir que exactamente? Él no tenía ningún tipo de sentimientos por nadie verdad, y no era como si los quisiera, su sangre fría casi lo obligaba a abstenerse de establecer alguna especie de contacto con otras especies, él sabía que sólo tenía un vínculo de amistad con Holly porque ella era un Lazo, y porque casi muere por su culpa.
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Noches Frías. (Cameron's Spin Off)
Hombres LoboLa nueva y reconquistada manada Volkov había abierto sus puertas al mundo. Su Alpha permitía ahora no sólo que otras especies de otras manadas la visitaran con permisos, y papeleo de por medio, pero algo que llamaba la atención eran sus recorridos...