The Call - Harco

1

Draco se encontraba en su sala común apuntó de dormir después de haber pasado toda la noche estudiando para los exámenes que se acercaban.

Estando ya arropado en su cama un sonido constante proveniente de su mesita de noche lo hizo abrir los ojos y mirar que era, viendo como su celular sonaba y vibraba en constante frecuencia.

Se levantó para ver qué era y vio que tenía una llamada entrante de un número desconocido, quedó muy confundido ya que solo sus amigos y familiares tenían su número personal.

Agarro el aparato y con algo de duda respondió y pego el artefacto muggle a su oído.

—¿Hola?— dijo con algo de duda.

—Draco— se escuchó una voz de el otro lado, una voz que conocía tan bien, 5 años escuchando todos los días esa voz, era imposible para el no reconocerla.

—¿Potter? ¿qué es lo que quieres? Son las...— separo el celular de su oído para verificar la hora— son las 3 de la mañana,— continuo— ¿qué mierda quieres?— le hablo hostil como siempre.

—Yo solo...quería escuchar tu voz— respondió y eso lo dejó atónito.

—¿Qué?— Draco no tenía palabras para responder aquello— Potter, ¿esto es algún tipo de broma o algo parecido? porque si es así es mejor que la termines ya y me dejes dormir, o la pagarás caro.

—No esta no es ninguna broma, es que yo...tú voz...me fascina— dijo y se escuchó un pequeño jadeo, esto dejó a Malfoy helado.

—Potter, ¿qué carajo haces?— preguntó con miedo a lo que pudiera responder.

—Simplemente admiro tu voz— respondió pero esta vez se escuchó más titubeante.

Draco guardo silencio y después de procesarlo un poco hablo:

—Potter, ¿estás bebido verdad?

—Tal vez lo este, tal vez no— dijo y se escucha una pequeña risita del otro lado confirmando lo que Draco ya creía.

—Sip, estás bebido— soltó un suspiro, ¿por que este chico ebrio le estaba llamando? Que lata.— Potter estoy muy cansado, se acercan los exámenes y- espera no tengo porque darte explicación, no me moleste voy a dormir.— con eso despego el artefacto de su oído y termino la llamada.—Idiota.

Dejo el teléfono en su mesita de noche y volvió a recostarse para segundos después escuchar de nuevo el maldito celular sonar.

Lo volvió a tomar ahora enfadado y respondió.

—Mira idiota, a mi no me importa que seas el-niño-que-vivió o algo parecido, a mi me importa un carajo- — iba a seguir pero una voz al otro lado lo interrumpió y lo dejó helado.

—Draco.— la voz firme y sería de su padre lo dejo sin habla.

—Ah ho-hola padre— le saludo con la voz temblando— ¿cómo estás?— dijo con notable nervio y vergüenza en la voz.

—En lo que cabe bien considerando que me llamaste idiota hace un momento— dijo con un tono de voz serio.

—Ah yo esto- padre perdón, yo- —de nuevo lo interrumpió.

—Ya me explicarás eso luego, ahora a lo que te llame...—

Después de esa llamada de su padre, que fue para informarle que con él y su madre saldrían del país por cuestiones de trabajo y él se quedaría solo en la mansión cuando terminara el curso, Draco volvió a su cama y ya pudo dormir en paz.

A la mañana siguiente Blaise lo despertó para ir a desayunar e ir a clases, así que se levanto con un ánimo pésimo, y sintiéndose algo raro, caminó hasta el baño a darse una ducha.

Estando en la ducha un recuerdo llego a su mente.

¿Potter le había dicho que su voz le encantaba? Merlin, el alcohol si que hace cosas raras en la gente.

Terminó su ducha, se vistió y se fue de ahí junto con Blaise y Pansy hacia el gran comedor.

Llegaron y se sentaron en su respectiva mesa, cuando por alguna razón su mirada se dirigió a la mesa de los leones, y sus ojos se posaron rápidamente en el chico de la llamada de anoche.

Se veía agotado, tenía una mano en la frente mientras que Hermione se veía enojada dándole lo que parecía ser un regaño.

~¡Ja! Por ebrio~ pensó para luego soltar una ligera risita mientras que se llevaba una cucharada de avena a la boca.

—Draco, te ves algo animado, ¿algo interesante?— pregunto Pansy mientras alzaba una ceja.

—Oh nada que te importe, Pansy— dijo mientras volvía a mirar su plato.

—Draco, ¿podrías hacerme el favor de no volver a quedarte a estudiar hasta tarde? No pude dormir por la maldita luz que había en el cuarto.— dijo Blaise que regresaba su mirada hacia sus amigos, ya que también estaba observando a alguien de otra mesa.

—Oh vamos que solo era una lampara, que dramático eres Zabini.

—Eso dices tú, pero después te pusiste a hablar por teléfono como si nada importara, por cierto, ¿quien era?— preguntó Blaise con notable curiosidad, a lo que Pansy también se acercó aún más para escuchar mejor.

Draco no sabía que responder, ¿como diría que el cara rajada le había llamado en la noche solo para decirle que le "encantaba" su voz?

—Ah solo era mi padre, dijo que saldría con mi madre del país y que tendré la mansión sola por todas las vacaciones.— respondió y recordó el incidente con su padre por lo que su cara se puso algo roja.

—¡Eso es genial, amigo!— comentó el de tez oscura— deberías invitarnos un día a ir, sería divertido— termino con una gran sonrisa.

—Literalmente te invitas solo Blaise— dijo Pansy riendo— pero es verdad Draco, sería divertido.

—Lo pensaré, probablemente si, sería aburrido estar todas las vacaciones solo con los elfos, así qué tal vez.

—Genial— dijeron Blaise y Pansy al unísono para luego seguir desayunando hasta que dio el momento de ir a clases.

El día transcurrió normal, sin el recuerdo de su rara llamada con Potter, hasta que llegó la noche estando a punto de dormir, su celular comenzó a sonar de nuevo.

Con el mismo número desconocido brillando en la pantalla.

~Potter~ pensó en seguida y rápidamente tomó el artefacto parada después de meditarlo un rato, respondió antes de que la persona al otro lado de la línea colgara.

—¿Hola?