💫6💫

469 98 11
                                    

2/3

Habían pasado tres días desde su reunión con el castaño, había tratado de hacerle saber que ya no tendría que preocuparse por recibir un mal trato de él, pero Hoseok aún desconfiaba de su presencia.

Si Taehyung quería conversar con él cuando se encontraba trabajando en el despacho, el castaño lo evadía diciendo que había trabajado suficiente y después se marchaba a su habitación.

Nunca había dudado de su físico o de sus tácticas para seducir pero cada vez que recibía su rechazo sentía que nada de sus encantos servía para ganar su atención.

Hoy durante el almuerzo ni siquiera se presentó en el comedor, pidió que le subieran la comida y no salio de ahí hasta las dos de la tarde, sospechosamente salió de la mansión a quien sabe dónde y cuando regreso, era alguien diferente.

Desprendía una aura más relajada y su sonrisa nadie se la quitaba, incluso cuando esa tarde discutió con Jungkook, Hoseok siguió sonriendo.

Lo único que se le ocurrió que pudo haber pasado es que se reunió con el hijo de Min en algún hotel, el estúpido chico pálido no se había aparecido por su casa después de ese día pero no había duda de que andaba cerca.

Su orgullo se veía afectado al saber que el castaño prefería a un fantasma escuálido como novio a alguien como él, muchas chicas y chicos matarían por una pisca de su atención pero Hoseok ni siquiera apreciaba su presencia, ahora los roles se habían invertido, y eso lo hacía enfurecer.

Taehyung no era un hombre que buscaba la atención de alguien, las personas morían por qué él las notará y ahora este chico cualquiera venía a creerse inalcanzable.

Para Kim Taehyung nadie era inalcanzable, el único que estaba fuera del alcance de los demás era él y si el tenía que rogar para obtener su dinero no lo haría, prefería quedarse en la quiebra a mendigar atención de alguien.

Con dos zancadas llego al lugar donde guardaban el licor, se sirvio un gran trago de vodka y lo bebió de un sorbo. Estaba harto de esa situación, si el quería podía someter a Hoseok.

Con una sonrisa retorcida se dirigió a la planta de arriba, si Hoseok no quería caer ante él entonces las cosas se harían a su manera y no era nada bonito cuando Taehyung se enfurecía.

Eran pasadas de las siente de la noche la hora en que él pequeño castaño se alistaba para ir a dormir, no hay mejor lugar para enfrentarlo que en su habitación, aunque Hoseok quisiera escapar no tendría oportunidad.

La puerta de roble indicaba que era la habitación de su difunto padre y que actualmente estaba ocupando Hoseok, no tocaría la puerta, no le daría la oportunidad de encerrarse con seguro, con sigilo empujó la pesada puerta.

Logró entrar sin hacer ruido pero la imágen frente a él le cortó la respiración.

Hoseok estaba de espaldas a él, vestido con un camisón transparente de seda negro, los boxers de encaje del mismo color podían apreciarse desde donde estaba, sus largas piernas que lucían tan suaves y ni hablar de su fina cintura, y con esas caderas que acentuaban su lindo trasero, Taehyung estaba viviendo una fantasía.

El lugar estaba inundado de su dulce aroma todo indicaba que recién había salido de la ducha. Quería darle un buen mordisco a ese delicioso cuello, marcar esa piernas con su dientes y dejar la marca de sus manos en esa cintura tan estrecha.

Cacciatore 💫 Vhope 💫 [Pausada]Where stories live. Discover now