Capítulo 14

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(Punto de vista de Amy)

Esto. No. Puede. Estar. Pasando.

Mike: Te juro que no lo sabía.

Amy: Imagino que es así. No creo que fueras tan siquiera a intentarlo sabiéndolo.

Mike: Así que eres tú.

...Una hora antes...

Mike me ha pedido que nos veamos en la terraza de la piscina. Me pregunto que querrá.

No me gustaría hacerme ilusiones, pero la verdad es que me siento bastante atraída hacia él. Tal vez pueda surgir... algo más... Sonrío solo al pensarlo, y esta sonrisa se hace más grande cuando veo unas manos tapándome los ojos desde atrás.

Mike: Estas preciosa.

Amy: ¿Bromeas? Llevo lo de siempre.

La verdad es que me he vestido lo mejor que he podido para la ocasión, y parece ser que me ha salido bien.

Mike: Me cuesta no desviarme en estas situaciones. Pero contigo siento que es diferente. Es como un impulso que no puedo controlar. Algo que no puedo guardar dentro de mí o explotaré. Tal vez sea muy precipitado pero te juro que no miento si en estos momentos te confieso que te quiero.

Esto es 1000 veces mejor a como lo esperaba. Ya conozco el impulso del que me habla porque yo lo estoy sintiendo ahora mismo dentro de mí. Tan fuerte que comienzo a besarle desesperadamente.

La desesperación, la emoción, la intensidad, la pasión... todo esto nos lleva hacia su dormitorio. Hacia su cama.

Nos desnudamos el uno al otro rápidamente. Tanto que sin querer le rompo la camisa. Si esto no es pasión, que venga alguien y me lo niegue tres veces.

Pero todo  acaba en apenas un segundo. Justo en el momento en el que ambos nos percatamos a la vez de algo que nos dentendrá y arruinará nuestra relación para siempre.

Una marca de nacimiento, algo que únicamente una persona de mi propia sangre podría tener. Mike es sin duda alguna mi hermano.

El cuencoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora