X. Blanco.

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Estando en medio del agua fria Jiang Cheng miraba con un gran nudo de sentimientos atorados en su pecho el como Xichen entregaba su cinta de pequeñas nubes dibujadas, sabía que era un símbolo muy importante para el y los suyos, así que tan pronto la vio frente a él se sonrojo y se apresuro fervientemente a tomarla para volver a ponerla en su lugar teniendo cuidado de los grandes cuernos, Lan Xichen dejó ver la clara confusión por sus acciones pero al contrario Jiang Cheng lo sujeto del cuello de sus blancas ropas terminandolas de mojar.

Sujeto a él lo atrajo para tomar su aliento en un beso, tranquilo se tomaba el tiempo para subir la intensidad, tomando por completo su labio inferior, chupando y lamiendo, todo aquello mientras mantenía sus ojos cerrados a diferencia de Lan Xichen que con ojos abiertos se sorprendió en un principio hasta poner las manos en su cintura acercandolo más, en seguida de ello Jiang Cheng se separó tan sólo unos centímetros de su rostro.

-Lo único que quiero es cuidarte y amarte, así que esta vez aunque sea por un breve instante regalame el tiempo para estar contigo y atesorar esto -

Se miraron parando el tiempo al su alrededor en una burbuja rosa donde solo estaban ellos dos, Jiang Cheng estaba intentando leer la expresión que Lan Xichen tenía en ese momento ya que al parecer no sabía cómo reaccionar, aunque aún así ya fuera obvio, estaba siendo cobarde lo que dejaba a Jiang Cheng como un aprovechado ante la situación y eso le molestaba.

- El invierno está cerca, vayamos a la orilla para que salgas del agua helada y entres en calor- A Lan Xichen le pareció divertido ese comentario ya que en Gusu había un manantial helado donde había entrado en repetidas ocasiones.

A una de las orillas del río siguieron con los besos hasta que los labios ardían y la respiración se empezaba acelerar, deseando ya no ser más consistentes del mundo que les rodeaba y del destino celoso les intentaba separar, Jiang Cheng con lentitud entrelazada sus brazos al rededor del cuello de Lan Xichen y su larga cola se enroyaba alrededor de de la pierna del mismo mientras agitaba su aleta con un claro desespero.

Las blancas y calidas manos de Xichen recorrían el torso desnudo frente a él, con minuciosa atención, sus dedos presionaron suavemente las mejillas, sus orejas, cuello y espalda, curioso seguia viendo como ese cuerpo ente su tacto parecía reaccionar, siguiendo en esa torpe pero cálida situacion sus deseos llegaron al punto donde sus cuerpos se unieron acomplandose perfectamente, una sensación maravillosa y casi mágica.

Jiang Cheng suspiraba profundo tomando todo dentro de él escondiendo entre sus manos el gran rojo color cereza que su rostro tenía, estaba tan avergonzado hasta las orejas y había comenzado a temblar tierna e inocentemente, Lan Xichen sin conocimiento de esto pensó de inmediato en que había causado algún daño al querer más de lo que debía, así que de inmediato detuvo su movimiento quedándose quieto, Jiang Cheng se descubrió el rostro una vez se detuvieron los divertidos movimientos que hacían los fuertes cuernos que se balanceaba.

Lan Huan sostuvo su mirada ante los ojos cristalinos que lo miraban pareciendo querer romper en llanto en compañía de una hermosa sonrisa que en susurros le decía que podía continuar, que estaba bien si era el, entonces nuevamente continuó con ayuda de lo húmedo del alrededor, siguio con un ritmo suave al compaz de la respiración de Jiang Cheng.

Lan Xichen podía sentir a la perfección el calor, el palpitar, la presión y el dolor que Jiang Cheng le compartía rasgado sus uñas en la piel desnuda, pasado el dolor el cuerpo se envolvio en placer inundando su cabeza hasta dejarla en blanco con besos y caricias, apuntó de llegar a quedar satisfechos, un pequeño miembro rosado y húmedo salió al exterior con un olor almizcle, por lo que Lan Xichen lo sujeto con suavidad viendo la inmediata reacción elecrificante de Jiang Cheng que se sujeto de inmediato a sus cuernos expresando miedo de lo sucedido.

-Esta bien, no tengas miedo... Si se a sentido bien, no hay porque tener miedo... Deja que sea yo quien te enseñe sobre ti mismo- Lo reconfortaba, enseguida de ello no paso demasiado para que ambos se pudieran llegar a ese punto y liberarse.

Así fue que a la orilla del río esmeralda una sirena envuelta en la túnica exterior mojada de su amante se encontraba recostada, Lan Huan con su túnica interior lo observó descansar por un corto período hasta verle abrir los ojos cobrando conciencia, coloco de mejor manera la ropa mojada para que no se empezará a secar y con temor fue el primero en pronunciar algo.

-A-Chen, Estos sentimientos puede que sean... ¿son sólo por tu canto?- Ante la pregunta Jiang Cheng fijo sus ojos al agua cristalina pareciendo como si no hubiera escuchado lo anterior.

-¿Y su fuera así?... las sirenas pueden conseguir que las personas sientan muchas cosas con nuestro canto... deseo, miedo y dolor- Regreso su mirada a Lan Huan con un semblante serio .

Lan Huan lo abrazo aprisionandolo a su pecho con fuerza deseando desesperadamente que eso no fuera cierto, las palabras de Jiang Cheng le causaban un dolor indescriptible en el pecho, lo estaba asustando el echo de que en algún momento estos sentimientos se fueran y este reencuentro solo fuera una despedida, un cierre a lo que el creía era el amor más grande que hubiera sentido, si todo esto solo era obra del canto hipnótico de una sirena era más que seguro que este sentimiento no soportaría el invierno y moriría antes de llegar la primavera.

Al darse cuenta de ello recordó las palabras de su tío quien quería que entendiera sobre que, lo que sentía moriría como una flor marchita antes de que pudiera florecer, Lan Huan al borde de la desesperación se percato de haber escuchado la agresiva voz de su tío a lo lejos por lo que girando hacia atrás vio algunos discípulos del clan Lan acercarse empuñando sus espadas.

-¡Xichen! He venido a dar fin a tu inaceptable comportamiento, aléjate de la sirena ahora- Vocifero Lan Qiren a los cuatro vientos con una gran cólera en sus palabras.

En respuesta inmediata Lan Huan beso a Jiang Cheng que sin saber que hacer se quedó inmóvil ante los movimientos rápidos del contrario.

-No dejaré morir estos sentimientos, sea que hayan sido causados por tu canto o no, yo te amo Jiang Wanyin y te volveré a ver así que solo espera hasta la primavera- Hablo tan rápido como pudo su boca permitirle pronunciar las palabras, viendo acercarse a los discípulos arrojó a Jiang Cheng al agua donde una vez los discípulos se acercaron lo suficiente lo sujetaron con fuerza de los brazos evitando que se arrojará al agua, estando ya atrapado igual no dejaba de gritar con ferocidad.
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//Hola, estoy aquí nuevamente trayendo un capítulo para hecerles llorar, esperen el siguiente con paciencia, recuerden dejar un voto, seguirme y un comentario para cualquier aclaración les mando mucho Love. ✨🌸🌸//

Al Sonido De Las Olas Del Mar. (ABANDONADO)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora