Narrador omnisciente
Después de no haber comido bien durante toda la semana, el sandwich de pavo que Camila le había recomendado a Lauren, era como una bendición para su estómago. Sintió como recuperaba lentamente sus energías y el dolor de cabeza se iba. Se sentía mucho mejor y su color de piel recuperó su tono natural. La pelinegra estaba tan concentrada en su sandwich que no se dio cuenta cuando su acompañante pidió un helado de chocolate con galletas de avena. La cara de deleite de Lauren al estar comiendo ese sandwich, alegró a la morena y se tranquilizó aún más al ver que ya no estaba tan pálida como hace unas horas.
Lauren estaba terminando su jugo cuando recordó que Camila estaba frente a ella. Alzó la mirada y se sorprendió al verla comiendo un helado de chocolate con galletas. "¿En qué momento había pedido eso?" pensó Lauren. Camila sintió la mirada de la pelinegra en ella y dejó la cuchara en el vaso un momento para preguntarle cómo se encontraba. Al verla se sonrojó por la cara de sorpresa de la pelinegra.
-¿Te gustó el sandwich? -Intentó preguntar Camila sin tartamudear.
-Estaba delicioso. Siento que mi alma regresó a mi cuerpo. Enserio, gracias. -La pelinegra sonrió.
-Me alegra que te haya gustado. -Camila sonrió levemente y siguió comiendo su helado.
-Oye... ¿Yo lo soñé o habías pedido un sandwich?- Preguntó Lauren confundida haciendo que Camila riera suavemente.
-Sí, lo había hecho, pero cuando acabé me antojé de helado y aún tenía hambre, entonces lo pedí. -Comentó nerviosa. -Lo siento, es que suelo comer mucho. No sé cómo sigo siendo así de flaca, sí como más de lo que se supone que alguien cómo yo, debería.
-No te preocupes. Yo soy igual, aunque no sé si fue por lo que no comí bien esta semana, que al comer el sandwich me llené muy rápido. -Dijo Lauren haciendo una mueca mientras se tocaba el estómago.
-¿Estás bien? -Exclamó Camila preocupada.
-Si, es solo que me duele un poco el estómago, no te preocupes. -La morena la miró pensativa.
-Creo que es mejor que nos vayamos ya, para que puedas descansar. Voy a ir a pagar la cuenta, ya regreso. -Lauren asintió. Camila se levantó y se dirigió a la caja. La pelinegra la siguió con la mirada y luego se recostó un poco en la mesa, tratando de que el dolor disminuyera un poco.
La morena se demoró más de lo que Lauren pensó, ya que se quedó hablando con la mesera que las había atendido. La chica rubia sonreía más de lo que una persona suele hacer cuando habla con un amigo o conocido, y eso le causó mucha curiosidad a Lauren. Por otro lado, la morena se notaba relajada y sonreía levemente. El dolor a Lauren la estaba incomodando mucho, por lo que decidió levantarse y ponerse su chaqueta. Se dirigió a las dos chicas y suavemente tocó el hombro de Camila para llamar su atención, la chica la miró y sonrió ampliamente. Lauren notó inmediatamente como Ángela hizo una mueca al verla. No entendió la razón, pero tampoco le prestó mucha atención, ya que ella quería irse lo más pronto posible a casa y lo que menos le importaba en ese momento era ver cómo la mesera le coqueteaba a Camila sin que la morena se diera cuenta o notara sus intenciones. Camila se despidió de la chica rubia con un abrazo mientras que Lauren solo le dio las gracias y sonrió sabiendo que ya podrían irse de allí.
-¿Te sigue doliendo el estómago? -Le preguntó Camila cuando ya estaban afuera de la cafetería.
-Si, un poco.
-Ya no hay taxis disponibles por lo que es hora pico. Ángela llamó y todos están ocupados. Creo que tendremos que ir en autobús. -Exclamó triste Camila.
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Love Found Us (Camren)
RomanceLauren y Camila tienen vidas totalmente distintas. Sin embargo, el destino las termina uniendo en el momento indicado de manera inesperada. Ambas chicas tienen mucho con lo que lidiar en sus vidas, por lo que creen haber encontrado la solución a un...