Querida familia:
Sentada bajo una farola de luz, en un parque desolado.
Escribo esto porque quiero abrir mi corazón.
No sé que es lo que me falta, nunca lo he sabido; pero quiero deciros que me voy en busca de ese no se qué que me consume.Sé que me falta alguna pieza y la
conseguiré a como de lugar. Siempre he sentido ese vacío en mi corazón y no se cómo repararlo.Debe haber algo que me complemente.
Querida familia:
Sentada al pie de un árbol muerto.
He encontrado mi lugar, es muy diferente a vuestro hogar; no es un lugar bello como deben pensar ustedes pero a mí me parece acogedor.
Los árboles están secos, sin vida; no hay flores ni grama verde.
Me gusta porque es igual a mi corazón: vacío y sin nada.No he encontrado lo que me complementa pero si encontré en lugar donde me quedaré.
Querida familia:
Emocionada de pie frente a una gran mansión victoriana.
Lo encontré.
Es un chico de familia adinerada. Tímido e irradia luz. Si lo pudiesen ver, se darían cuenta de que es todo lo opuesto a mi: alegre, colorido y vivo. Por eso mismo se que me complementa. Él tiene todo lo que yo no tengo.Hay algo en el que todavía no puedo decifrar.
Querida familia:
Apoyada sobre una roca.
Hace años no os escribía.
Mi hogar a cambiado mucho; el prado es verde, los árboles frondosos y hay muchas flores.
Todo cambió desde que el vino a vivir conmigo.Descubrí que era ese algo que había y todavía persiste...
Era amor.
El tiene el mucho amor para dar.
Justamente lo contrario a mi.
Tiene tanto que me dió un poco para que yo pudiese amar también.Por primera vez en mi vida puedo decir que soy realmente feliz.