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— corre... ¡Corre!— ambos chicos aceleraron dirigiendose de regreso al puente y hacia el auto, pero la pantera en su forma animal se movía con agilidad y velocidad incomparables.

Se apresuraron a correr por el puente colgante pero ambos frenaron brusco y se tambalearon sobre sus pies cuando el animal salto sobre de ellos y cayó algunos metros adelante, bloqueando el camino. Jungkook busco con los ojos y se volteo hacia el mayor — ¡salta!—.

Y rápidamente se lanzaron del puente, cayendo torpemente sobre una gruesa rama que era lo suficientemente fuerte como para sostenerlos. El conejo tomo la muñeca del pelirrojo y lo ayudo a pararse.

— ¡Rápido!— el más pequeño los guío por la rama hasta llegar a otra que se encontraba rápida por dentro y los dos se agacharon para poder entrar.

El gran felino gruño con furia y se subió al tronco, comenzando a rasguñar con sus patas la madera vieja, sacando capa por capa. Los dos híbridos seguian avanzando arrastras y Jungkook aprovecho para sacar su radio y llamar a la oficina policial.

— ¡Oficial Jeon, alguien responda!— la línea se mantuvo en silencio y el azabache volvió a gritar — ¡ALGUIEN RESPONDA, ES UNA EMERGENCIA!—.

Finalmente el pitido sonó del otro lado de la línea.

— ¡Escuchénme!¡Tenemos un 1091, un jaguar se volvió salvaje!— el conejo y el zorro salieron corriendo del tronco — ¡Vaini Tujungla!—.

— ¡Es Tujunga!— corrigió el zorro.

No puede ser.

— ¡NO ME IMPORTA!— una voz joven respondió al otro lado.

— ¡Bien, mandaremos refuerzos!— sin embargo el pie de Jungkook resbaló con el musgo húmedo de la rama y estuvo a punto de caer de no haber sido por Kim, quién estiró su mano y lo jaló de regreso a él, aferrando con una de sus manos su bíceps.

Lamentablemente, el radio si cayó al precipicio y la voz del otro oficial se extinguió prontamente.

Jungkook y Taehyung siguieron corriendo a toda velocidad, adentrándose a una zona llena de arbustos y plantas e intentaron hacerlas a un lado con sus brazos lo más rápido posible.

El mayor medio sonrió al distinguir una plataforma conocida. Jungkook también lo vio.

— ¡Corre a los teleféricos!— pero el tobillo de Jungkook se había lastimado antes y se volvió a doblar, haciendolo tambalear y quedar bastante rezagado.

Al sentir los gruñidos demasiado pegados a dónde el se encontraba, extendió su mano hacia un farol y se apoyo en el para girar erradicamente, deseando que eso lo alegra de la pantera. Pero la lluvia había hecho las plantillas de madera barnizada una plataforma extremadamente resbaladiza y Kook se deslizó por el suelo hasta caer y ser solo sostenido por su única mano sana.

Taehyung abrió la puerta del teleférico y volteo, frunciendo su ceño al no ver a Jungkook.

— ¿Zanahorias?— los ojos de ambos se cruzaron — ¡Zanahorias!—.

— ¡Corre!— la pantera gruño, lista para abalanzarse sobre Kim.

Y antes, Kim Taehyung hubiera escapado sin dudarlo. Pero no, el no dejaría a Jungkook solo, nunca. Dejó ir el teleférico y se colocó frente a frente con la bestia.

— ¡No, intenta subir, yo lo distraigo!— Taehyung dejo crecer sus garras, sus colmillos y dejo que sus ojos se volvieran del color de su animal interno. Regreso el gruñido al otro, retandolo.

La pantera se vio sorprendida y confundida al principio, el tamaño de un zorro no era nada comparado con el del gran depredador ¿Cómo se atrevía a retarlo?

DISTOPÍA | taekook.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora