🦋
Lu Yun lo regaño:
—Mira lo que has hecho. ¿Cómo te atreves a mencionar el tema del divorcio? Solo fui al extranjero durante un mes para hacer negocios y golpeaste a Nian Nian así. ¿Cómo logré que hicieras eso? Lo que te dije que no funcionó, ¿cierto?
Wen Niannan estaba asustado, pero no esperaba que Lu Yun golpeara a Gu Yansheng.
—Deja a un lado tus tonterías. ¿No creerás que no sabía que trajiste a ese chico de Shen Luoan de regreso? ¿Crees que puedes ocultármelo? ¿Sabes qué clase de hombre es? En aquel entonces, él...
—¡Mamá!
Wen Niannan la detuvo a toda prisa.
—Mamá debes estar cansada por haber volado durante toda la noche. Ve a descansar un poco. Aquí tengo a Xu para que me cuide. Estaré bien.
Lu Yun que fue interrumpida, trató de continuar, pero su asistente entró y dijo:
—Sra. Lu. El proyecto ha sido acordado por teléfono con Land General de Country F. Por favor, regrese y firme lo antes posible.
—Entiendo, pero aún tengo algo que decirle a Niannan, así que salgan.
Después de que Lu Yun expulsó a toda la gente de la habitación, rápidamente tomó la mano de Wen Niannan y dijo con amargura:
—Hijo mío, lo siento mucho por ti. Siempre has sido tan malentendido que ahora realmente te hicieron daño. En ese entonces, le di a Shen mucho dinero para que se fuera, pero en realidad él negoció conmigo, dijo que quería ir a otro lugar para estudiar en el extranjero en una escuela de música, no pensé que te acusaría solo para regresar de nuevo a Yansheng.
Después de cruzar unas cuantas palabras con Wen Niannan, la mujer salió. Gu Yansheng que estaba apoyado perezosamente contra la pared mientras jugaba con un encendedor, vio a su madre salir, inmediatamente se acercó.
—Madre, puedes tomarte un descanso hoy y volver al país F, mañana.
—No, mejor cuida bien de Niannan. Él es un hombre digno de tu amabilidad. El vale tu tiempo y tú lo mereces.
Lu Yun le dio una mirada significativa y luego se dio la vuelta.
Gu Yansheng de repente miró profundamente a Wen Niannan, que yacía en su cama, y vio como su madre se marchaba y regresaba a la compañía.
✤✤✤✤✤✤
[Edificio del Grupo Gu]
En la oficina del presidente, Shen Luoan estaba sentado lánguidamente en el sofá comiendo un postre y leyendo una revista de música cuando de repente miró a Gua Yansheng, que estaba trabajando en algunos documentos, entonces, se levantó y se acercó.
Gu Yansheng, sintiendo que Shen Luoan se había acercado a él, lo miró con los papeles en mano.
—¿Qué pasa, holgazán, acaso ya te dio flojera el sofá?
—No, pero veo que has estado trabajando en asuntos oficiales, y por eso he venido a ayudarte a aliviar el estrés.
Shen Luoan se reclinó sobre la mesa y miró a Gu Yansheng como si fuera un gato.
Gu Yansheng suavizó su corazón y levantó la mano para acariciar el cabello de Shen Luoan. Al verlo, sintió que estaba contento de ver a la persona afable y delicada que estaba frente a él.
—Lo siento Luoan, te he causado tanto dolor en los últimos años porque he permitido que hayas estado vagando por un país extraño, no hubieras sufrido tanto si le hubiera pedido directamente a mi madre que te casara conmigo.
—Nunca te he culpado. No siento ninguna tristeza si pienso en ti. Aún te tengo, y soy recompensado por toda la música que he escrito gracias a esas experiencias.
La fuerte apariencia de Shen Luoan hizo que Gu Yansheng se sintiera triste, odiaba que hubiera sufrido tanto dolor por su incapacidad para protegerlo.
Pensando en los días en los que perdió a Shen Luoan, durante esos tiempos no pudo calmarse por varios días, estaba tan abrumado por su pérdida que le resultó difícil superarlo, luego, supo por el llanto de su amado, que fue amenazado y obligado por Wen Niannan y su madre lo envió al extranjero para no permitirle estar más cerca de él. Cuando Shen Luoan lo contactó, Gu Yansheng sintió que su corazón estaba aún más disgustado con Wen Niannan.
Gu Yansheng, que estaba tan inmerso en su odio, no vio, en sus brazos, un color y brillo extraño en los ojos de Shen Luan.
🦋
ESTÁS LEYENDO
Mi ex marido dice que soy un loto negro
Ficção Geral"¡Tu hipocresía, me enferma!". Esa frase es la que Wen Niannan y Gu Yansheng han escuchado más durante sus tres años de matrimonio. Desde el momento en que Gu Yansheng vertió vino tinto en su cabeza frente a todos en la boda, Wen Niannan supo que no...