Afecto

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Caminaba alejándose del sonido ensordecedor de la musica tratando de mantener la calma, a pesar del escándalo era capaz de escuchar los gritos repetidos de su nombre, sabía que el dueño de estos lo seguía.
Aún estando afuera, el ruido de la música y la vibración que emitía seguía presente, en parte lo agradecía, así podía fingir que no escuchaba a la persona detrás de el, pero con un fuerte apretón en el hombro lo giro para verlo de frente.

Habían ido a una simple reunión entre amigos en casa de su mejor amigo, había asistido con su actual pareja, pero desde que menciono la invitación la discusión había comenzado por un tonto ataque de celos.

Así era casi siempre, celos sin sentido que veía justos por antiguas experiencias de las que no había aprendido. Comenzaba por su manera de ser, lo conoció siendo extrovertido y amable, haciéndose travesuras con sus seres más cercanos, pero al castaño no le parecían eso y cuando Willy comenzaba a jugar con el, le cortaba el rollo e incluso lo ignoraba, Willy se sentía mal y se quedaba con él hasta que le perdonará, lo hacía de manera tan discreta que cualquiera pensaría que era simplemente jugando y que quien tenía las riendas en la relación era Willy. Seguia su manera de vestir, aunque esto sí lo notaron Vegetta y Luzu el lo negó, decía que su nueva ropa era más cómoda, que ya era suficiente la atención que tenía en el trabajo como para todavía lo molestaran fuera de este. Lo último fue su trabajo, dónde lo seguía siempre que podía, Fargan era amigo de su jefe a si no tenía problemas para estar ahí, aunque al principio le gustaba pasar más tiempo con el, ahora le incomodaba sobretodo cuando discutía con sus compañeros por la manera en que se comportaban con su novio.

—¿No me escuchas? Te seguí por toda la casa- aunque su voz era tranquila, se incrementaba la presión en el agarre que ahora tenía en su antebrazo.

—No, por eso estoy aquí afuera...— movía el brazo lento para tratar de soltarse pero a Fargan poco le importaba la marca que le quedaría.

—Si te molesta el ruido hubiera sido mejor no venir, yo te lo dije— llevo su mano libre a la mejilla de su novio y le dió una suave caricia.

—A ti es al que le molesta venir, te dije que si no querías te podías quedar en la casa...— una pequeña y burlona risa lo interrumpió, volvió a sentir la mano de su pareja pasar por su rostro pero el tacto se hizo rudo.

Willy pensaba que estaba bien con su pareja, no le gustaban sus celos, pero se sentía muy mal estando solo cuando peleaban o cuando salía y veía a todos los demás felices, sobretodo a sus amigos que en cada salida pasaban tiempo de calidad entre ellos y el quedaba apartado. Lo peor era escuchar los reproches de Fargan y las excusas de que estaba ocupado, entonces debía tragarse ese orgullo que siempre lo ha caracterizado, aceptando lo que le decía su novio.

Hasta el día de hoy no había pasado de reclamos, unos insultos a sus cosas y uno que otro apretón para llamar su atención.

—¡Ey!...¿Qué hacen aquí afuera?— decía Auron mientras se acercaba con Mangel, estaban afuera fumando y entre bromas, notaron la "discusión" y los gestos que hacía Willy.

—Nada, estoy tratando de convercerlo de irnos, ya estamos algo borrachos y es mejor irnos ahora que aún puedo conducir— al fin liberaba suavemente el brazo de Willy y le daba una sonrisa tranquila al par frente a ellos. Aún así ellos sabían lo que habían visto, así que le preguntaron con la mirada a Willy, el solo asintió lentamente.

—Pueden quedarse en casa de Vegetta, Luzu y yo le pedimos la casa para eso, dejen que nos pague bien el favor que nos debe....

—Gracias, pero mañana tengo trabajo, me ha gustado mucho la fiesta, no creí que Luzu se comprometeria con alguien tan contrario a él, me agradas mucho— dicho esto volvió a tomar a Willy del brazo y comenzó a caminar a la salida.

Había dejado a Auron inconforme con la situación pero ya le había dicho Luzu que lo mejor era no intervenir de inmediato, Fargan era muy impulsivo y él también la situación solo se haría más grande, prefería que le dijera si algo así pasaba y luego el hablaría con Willy, pero Mangel no se quedaría nadamás viendo, así que en cuanto vio que el agarre se volvía fuerte de nuevo, tomo a Willy de su mano libre.

—¿Y Willy sí quiere irse?— vio como los ojos de Willy se abrieron por sorpresa, también consideraba a Mangel como alguien cercano pero nunca creyó que intervendria por el.
Aún así Willy se safo de su agarre y miro rápidamente a Fargan esperando que no respondiera mal.

—Sí, no creó que quiera quedarse— fijo su mirada en su novio, esperando que captará lo que quiso decir.

—No, no quiero quiero quedarme. Está bien, les mandó mensaje después y quedamos otro día— sonreía genuinamente o eso parecía, mientras apretaba la mano de Fargan como gesto con el que pedía que se relajara.

Siguieron caminando a la salida, no se habían despedido de nadie más.
Lo que había pasado es que Frank se había puesto hablar muy animadamente con Willy recordando viejos momentos de diversión que habían pasado juntos, esto a Fargan no le había gustado y además que ya no tenía tanta paciencia por la escena que le había hecho Willy para poder venir, así que sabiendo que el novio de Frank estaba borracho se acercó a él y se puso a coquetear sinicamente, se había aprovechado que Alex no se encontraba del todo consiente, cuando ambos notaron lo que estaba haciendo, Frank solo cargo a Alex en la espalda y se fue con él hablar en un lugar privado, Willy iba a comenzar a hablar cuando Fargan le puso un dedo en los labios en señal que se callará, después entre risas le dijo que "solo ponía pareja la situación" y se hazlo de hombros quitándole importancia, Willy agarró sus cosas y esquivando a todo que se le pusiera en frente camino hacia afuera.

En cuanto los vió salir por la puerta de la barda que rodeaba la gran propiedad, Mangel se giró a ver a Auron que ahora se dirigía muy molesto a buscar a su prometido para decirle lo que había sucedido, lo siguió para ayudarlo a reunir a los demás, ahora por más que Willy lo negara sabía que la marca en sus brazos diría lo contrario.

Mientras tanto en el auto la cosa estaba tan tensa que el aire se sentía pesado, aunque Willy debía estar molesto no quería que su novio lo estuviera, iba sobandose las marcas que nunca antes habían sido así de fuertes, los morados que comenzaban aparecer le dolían y esto le provocaba ganas de llorar pero era más por la decepción de que la persona que amaba lo habia lastimado. Fargan apretaba el volante y solo miraba el camino ignorando completamente lo que estaba haciendo su novio, incluso cuando las brillantes esmeraldas se quedaron fijas mirándolo.

—¿No te vas a disculpar?...— dijo mientras levantaba el brazo para que viera lo que le había hecho, está era la principal desventaja de tener la piel tan clara.

—No tengo porque, no fue mi culpa...— sin mirarlo, con la mano más cercana a su novio soltó el volante y con su pulgar frotó la zona lo más suave que pudo.

Willy se quedó viendo la manera en que el otro trataba los moretones.
—No tenías porque hacerlo, me lastimaste y yo era el que debía de estar molesto, no tu.— apartó su brazo y paso su otro brazo sobre si mismo, como si se abrazará, después de no escuchar respuesta se giró completamente y decidió que dormiría en lo que llegaban a casa.

Attention | WillganDonde viven las historias. Descúbrelo ahora