Kagehina: chaquetas: Traducción

Parte III

Kageyama tenía frío. Podía haberse acercado a Hinata y exigirle que le devolviera la chaqueta, pero no lo hizo.

"¿Tienes frío Kageyama?" Preguntó Daichi, el capitán del club. Estaban a punto de empezar el entrenamiento después de clase. El colocador dejó de frotarse las manos.

"La verdad es que no", respondió Kageyama, pero incluso para sí mismo eso sonaba a mentira. Las manos frías hacían más difícil el juego. Si algo afectaba a su capacidad de juego se aseguraba de mantenerlo a raya, así que Kageyama racionó que no tenía tanto frío.

"Parece que te estás congelando. ¿Dónde está tu chaqueta?" Daichi pregunto.

"La tiene Hinata". Suga se acercó. El setter ofreció a Kageyama una sonrisa despreocupada y se puso al lado de Daichi.

"Hinata - Kageyama tiene frío. Dale su chaqueta". Dijo Daichi con decisión. Suga parecía querer abofetear a Daichi. Kageyama se sintió obligado a insistir en que Hinata podía quedársela cuando se dio cuenta de que estaba temblando.

Hinata se acercó a ellos y se quitó la chaqueta. Kageyama volvió a ver a Hinata con la chaqueta. Hinata parecía aún más pequeño y casi más lindo con la gran chaqueta. Parecía que se le caía de su pequeño cuerpo con facilidad y se la tiró a Kageyama despreocupadamente.

"¡Gracias por prestármela!" Hinata sonrió alegremente. Fue a traer su propia chaqueta que estaba en su bolsa.

"Sí". Kageyama se encogió de hombros para ponerse la chaqueta, que le resultaba un poco rara. Se hundía un poco en el lado izquierdo porque había un puñado de mini caramelos de colores en el bolsillo. Y olía un poco diferente. Como Hinata.

Daichi POV

Suga abofeteó casualmente a Daichi en la sala del club después de que todos se hubieran ido.

"Kageyama y Hinata. Citas. Chaqueta de novio. Hinata llevaba la chaqueta de Kageyama. Énfasis en LLEVABA". Suga lo deletreó para él.

Daichi se dio cuenta.

"Oh."

"Sí, Sherlock".

Hinata POV

"Kageyama tengo frío", se quejó Hinata de camino a casa después del entrenamiento. Su chaqueta no era tan grande ni cálida como la de Kageyama. Se había acostumbrado a la tela extra en los últimos días. El invierno estaba a punto de llegar.

Su aliento se nubló frente a ellos y Kageyama ya llevaba una bufanda.

Kageyama lanzó la chaqueta a la cabeza de Hinata sin decir nada.

"¡Gracias!" Hinata se la pasó por los hombros y le sonrió a Kageyama. Ahora había dos capas de chaquetas. No entendía cómo Kageyama era invencible al frío, pero estaba celoso. Con sólo la camiseta y la bufanda, Kageyama tenía un aspecto un poco raro. Le recordaba a Hinata a un superhéroe de un programa que Natsu estaba viendo.

"Mm-hmm." Kageyama volvió a envolver su bufanda.

"¡Oh, me olvidé de esto aquí!" Hinata sacó los caramelos multicolores de los bolsillos de Kageyama.

"Espero que no te importe que me haya comido algunos", dijo Kageyama con displicencia.

"Claro que no, mi madre tiene un tarro enorme de ellos. ¿Quieres uno?" Hinata desenvolvió uno de fresa para él. Se metió el caramelo en la boca.

"Claro. De naranja". Kageyama hizo un gesto para que Hinata dejara de caminar. "Espera".

El setter dio unos pasos hacia delante y se giró para mirar de nuevo a Hinata. Sonrió. "Lánzalo".

"¿Eh? ¿Así?" Hinata hizo la mímica de un lanzamiento por debajo de la cabeza.

"No boke, desenvuélvelo". le indicó Kageyama. Hinata retorció el brillante envoltorio naranja y lo metió en el bolsillo derecho de la chaqueta. Lanzó el caramelo al aire en un arco gigante. Kageyama se concentró en el pequeño caramelo naranja que surcaba el aire y lo atrapó fácilmente con la boca.

Kageyama sonrió. Abrió la boca para mostrarle a Hinata el caramelo que tenía entre los dientes. Era algo muy raro, pero cuando Kageyama se divertía así, Hinata no podía evitar sonreír. Supuso que si una chica hubiera estado cerca, este sería un momento en el que se daría cuenta de que le gustaba este idiota. Tal vez se enamoraría. Tal vez.

"Hinata, ¿tienes frío?" Daichi le preguntó a Hinata al día siguiente. Acababan de terminar el último juego de Karasuno vs Karasuno del día.

"¿Oh? Un poco, supongo". Hinata seguía pensando en la última jugada del partido, no en la temperatura. Kageyama había metido la pata en muchos lanzamientos hoy. Hinata estaba molesto consigo mismo por no adaptarse, pero más molesto con Kageyama. Últimamente había estado mal. Realmente apagado.

"Kageyama, ven aquí. Hinata tiene frío". Daichi se alejó de ellos torpemente tras ver que Suga hacía señas de que parase al otro lado de la habitación.

"¿Qué se supone que debo hacer?" Kageyama se quedó mirando a Hinata sin impresionarse. Sabía que él también había metido la pata en el juego.

"No lo sé". Hinata estaba confundido. Últimamente nadie en el club tenía sentido.

"¿Tienes frío?"

"¿Qué?"

"¿Tienes frío? ¿Y ahora también eres sordo idiota?"

"Sí, quiero decir no, quiero decir, sí tengo frío". Hinata tartamudeó. La chaqueta de Kageyama le golpeó en la cabeza. Hinata se la había devuelto hacía unas horas después del entrenamiento matutino.

"Toma".

"Puedo ponerme el mío, ¿sabes? Seguro que tienes frío". Señaló Hinata mientras se desenredaba la chaqueta de la cabeza. Por supuesto que quería la chaqueta, pero se sentía un poco codicioso al cogerla constantemente. No había esperado que Kageyama le dejara tenerla en absoluto.

"Devuélvela entonces". Kageyama estaba a punto de arrebatarle la chaqueta.

"No". Hinata se puso en posición de defensa. Mantuvo sus ojos en Kageyama mientras se encogía de hombros con la chaqueta. Ésta cayó alrededor de sus brazos y se tragó sus manos. Los bolsillos se hundieron con unos cuantos caramelos y envoltorios. Y olía a Kageyama. Su ritmo cardíaco se disparó. Hinata se quedó mirando al setter, observándolo. Imposible de leer, Kageyama se giró de nuevo hacia la cancha.

Daichi POV

"¿Qué ha sido eso?" Suga le dio un codazo a Daichi.

"No sé... lo he intentado". Daichi hizo una mueca ante la confusión del primer año al otro lado de la habitación.

Suga suspiró. Se relajó cuando Kageyama le lanzó a Hinata su chaqueta y frunció el ceño.

"Deja que hagan lo suyo". Suga sonrió con pesar. Levantó un hombro. "Estarán bien".

"Sí", respondió Daichi. Tiró de las mangas de su chaqueta, o mejor dicho, de la de Suga. No era tan obvio como el intercambio de Kageyama y Hinata, pero si te fijabas bien veías que la que llevaba Suga le quedaba un poco más grande de lo que debería, y la de Daichi era un poco pequeña.

"A veces eres tan denso", dijo Suga pinchando el brazo de Daichi.

"Lo sé", Daichi empezó a quitar las redes con Suga. "Gracias por soportarlo. Y por aguantarme a mí".

"Sinceramente, no sé cómo". De repente, Suga plantó un beso en la mejilla de Daichi. A pesar de que nadie los miraba, medio detrás del poste de voleibol, Daichi se sonrojó.

"¡Suga!" Siempre lo ponía nervioso.

"¿Sí? Puedo besar a mi denso novio de vez en cuando". Suga se rió. Y Daichi tuvo que sonreír.

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Autor(a): Delta_45a

Traducción: TweekyLover92