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Distintos caminos

Ahsoka miraba fijamente la taza humeante que tenía delante, hacía unos minutos que había despertado y Obi-Wan la había recibido con el desayuno ya listo.

-¿Como es que no tiene el chip? -Preguntó el pelirrojo mirando a la habitación donde Rex se encontraba todavía dormido.

-Él... No se que pasó exactamente-Comenzó la togruta con sinceridad, aquel día habían pasado muchas cosas como para poder cuestionarse todas ellas-Estabamos volviendo con Maul a Coruscant cuando él tuvo que atender un llamado, yo me quedé en el puente y de repente pude sentir algo.

-¿Qué sentiste? -Preguntó él interesado mientras se sentaba en la silla de enfrente de la togruta.

-A Anakin-Contestó con tristeza-No se que le pasaba exactamente, pero estaba dolido y confundido-Ahsoka negó alejando aquel recuerdo de su mente, por más que lo intentaba descifrar más difícil se tornaba de descubrir-Luego me giré para buscar a Rex, debíamos llegar a Coruscant cuánto antes pero cuando le miré pude ver que estaba diferente -Continuó la chica relatando, no quería pensar en su maestro en esos momentos-Estaba temblando y de repente me apuntó con sus blasters pero antes de disparar me pidió que buscase a Cincos, yo... -Ahsoka suspiró tomando la taza caliente entre sus manos-Conseguí salir de allí hasta otro sitio seguro y pude entrar a los archivos donde vi un holograma en el que Rex hablaba sobre un chip y sobre Cincos ¿Sabes lo ocurrido?

Obi-Wan suspiró pesadamente, ahora veía todo aquel engaño de palpatine, como habían pasado pistas sobre aquel siniestro plan frente a sus narices mientras que ellos lo obviaban confiando plenamente en la República y en el canciller.

El jedi miró a la joven y decidió contarle la verdad al respecto, además de no querer mentirle más, se arriesgaba a que Rex le delatara, por lo que después de unos minutos relatando lo sucedido el silencio inundó nuevamente la habitación.

-¿Por qué no investigasteis más sobre ese chip?-Preguntó Ahsoka molesta ¿Tanta confianza le tenían al canciller para creer ciegamente en él?

-Lo hicimos, Shaak Ti investigó todo lo posible en Kamino-Respondió Kenobi pasando una mano por su barba-Pero no encontró nada fuera de lo normal, la explicación de los Kaminoanos parecía ser la más certera.

Ahsoka arrugó el ceño dispuesta de debatir aquello, pero antes de abrir la boca se centró en su taza y en el humo que seguía saliendo del líquido aunque con menos intensidad que hacía unos minutos.
La togruta suspiró y se obligó a cambiar de tema, sabía que aquello solo generaría un nuevo debate y ninguno de los dos estaba en condiciones de aguantar más discusiones.

-¿Cómo conseguisteis localizarme?-Preguntó Obi-Wan cambiando de tema primero.

-Tuve una visión-Respondió ella-Tú estabas en las arenas de Tatooine y de repente alguien aparecía a tus espaldas dispuesto a matarte, tenía un sable rojo.

Obi-Wan pasó su mano por su barba pensativo mientras la chica lo miraba preocupado.

-Debes irte de aquí, corres peligro-Dijo la chica-Ven con nosotros.

-No puedo hacerlo, Ahsoka-Admitió él con tranquilidad, algo que molestaba a la togruta ¿Acaso no la tomaba en serio?

-Pero corres peligro, no puedes simplemente esperar a ser atrapado, eso no es lo que me enseñaste-Dijo ella elevando un poco el tono de voz.

-Ahsoka, las visiones no son siempre certeras-Recordó el mayor.

-Pero me han llevado hasta aquí, hasta ti.

-Lo se, pero no todo es siempre como parece-Dijo Kenobi-Si algo te dejé claro durante tu entrenamiento fue a tener paciencia y a observar con detenimiento.