Rex observó a lo lejos la granja en la que había estado tiempo atrás, una sonrisa escapó de sus labios inconscientemente.
Ahsoka estaba feliz de ver así a su capitán, habían sido días muy sombríos para los dos.
La granja parecía seguir funcionando, algo que relajó a los dos, Cut debía estar bien, o eso esperaban.
El primero en subir al porche de la pequeña casa fue Rex, quien picó a la puerta con cierta impaciencia que no pasó desapercibida por la togruta.
-Relájate Rex-Susurró Ahora tomando su mano en un intento de tranquilizarle, pero por algún motivo que el capitán desconocía, con aquello solo aumentaron sus nervios.
La puerta se abrió dejando ver a dos niños pequeños los cuales miraban curiosos hasta que recordaron a Rex. Los niños corrieron hacia el hombre a abrazarlo y él se agachó para que la posición fuera más cómoda.
Ahsoka estaba enternecida por aquella escena tan tierna, pero rápidamente tuvo que serenarse al notar a una chica correr hacia ellos armada.
-Quietos-Demandó apuntando su arma hacia ellos.
-Suu-Llamó el clon levantándose para que la mujer lo reconociera.
-¿Qué haces aquí? ¿Y quién es ella? -Preguntó mientras bajaba un poco el arma.
-Es una historia complicada-Dijo Rex rascándose la nuca-¿Está Cut en casa? -preguntó.
-Id a vuestro cuarto niños-Ordenó la madre a sus hijos.
-Pero mama-Se quejó la mayor.
-Sin peros.
Los niños subieron hasta su habitación con la cabeza gacha, ellos querían estar con Rex. Suu indicó a la pareja que la siguieran y los hizo pasar al interior de su casa, donde les contó todo lo que había pasado desde la formación del imperio.
-Él estaba...Raro, pero seguía siendo él-Dijo la mujer tomando se taza humeante, Rex y Ahsoka la observaban desde sus asientos frente a ella-Hasta hace unos días, varios soldados vinieron a la granja, él dijo que se encargaría y se fue hacia ellos, pero no volvió.
-¿Sabes a donde se pudo ir? -Preguntó Rex.
-No-Soltó ella con pesar-Yo entré con los niños a la casa, el quería que así fuera.
Rex dejó escapar un sonoro suspiro mientras que se erguía en su asiento.
-¿Sabes si el imperio ha implantado alguna base cerca de aquí?-Preguntó Ahsoka, algo le decía que ese hombre no había muerto, no solo era por saber que era amigo de Rex, era un presentimiento.
-No parece haber nada del imperio aquí-Dijo el soldado con molestia, él pensaba que sus hermanos lo habían matado por traición, tal y como habrían hecho en la nave hace unas semanas.
-En realidad si-Contestó Suu-Un vecino me informó sobre una base a varios kilometros de su granja, hay pocos soldados en el exterior custodiando-La Twi'Lek se levantó de su silla para ir a por un papel en una de sus estanterías-Por lo menos eso es lo que me dijo.
-Eso es de mucha ayuda-Dijo Ahsoka tomando el papel que la mujer le ofrecía, un mapa-Seguramente tengan ahí a tu marido.
-¿Eso crees?-Preguntó esperanzada ella.
-Si-Respondió firmemente la togruta-Iremos a averiguarlo, si está allí lo traeremos de vuelta.
Suu sonrió con esperanza mientras contenía su alegría, su esposo regresaría. Con cierto nerviosismo se disculpó para subir las escaleras de la casa, las cuales la llevarían a la habitación de sus hijos.
-Ahsoka-Dijo Rex en un susurro, no quería que Suu le oyera-¿En serio quieres ir?
-Claro que si, Rex-Contestó extrañada-¿Por qué no iríamos?
-No se, el imperio nos quiere dar caza, debemos huir y lo más importante, seguramente Cut esté muerto-Dijo con cierto sarcasmo.
-No sabes si está muerto-Defendió la togruta.
-Ya los viste en la nave, Ahsoka-Dijo seriamente, él valoraba la fe que tenía la chica en sus hermanos, pero eso no ayudaba ahora, ellos no dudarían en atacarla-Si se enteraron de su traición seguramente lo hayan castigado por ello.
-Castigar, no matar-Dijo ella cruzándose de brazos-¿Por qué no quieres ir a averiguarlo?
-Porque no quiero que te pongas en un riesgo innecesario-Soltó él elevando un poco la voz.
-Si mis instintos no fallan está misión no será innecesaria-Habló Ahsoka en tono bajo.
Rex suspiró mientras pasaba una mano por su barbilla, notando como una barba comenzaba a crecer en ella.
-Está bien-Dijo Rex con resignación.
Ahsoka sonrió con alegría y saltó hacía él, rodeándolo en un abrazo.
-Lo encontraremos-Dijo ella con firmeza.
La togruta se separó y salió en dirección la planta de arriba, para avisar a Suu seguramente.
Rex se quedó ahí parado, aun podía notar la sensación de tenerla en sus brazos. Sacudió su cabeza alejando aquellos pensamientos y salió de la casa, necesitaba un respiro.
-Suu nos ha prestado estas mantas, dice que podemos dormir en el granero, tiene un colchón guardado-Dijo Ahsoka apareciendo tras muchos minutos, Rex casi se había dormido en aquel porche en el cual estaba sentado, ahí estaba tranquilo-También nos ha preparado algo de cena, ella ya se irá a dormir-Informó bajando los pocos escalones hasta el césped.
-Bien-Respondió Rex pasando una manos por sus ojos para despejarse, sabía que debían idear un plan.
-Iré a dejarlas allí, ¿Traes tú la cena? Está en la encimera.
Ahsoka caminó al granero y entró, cuando él la perdió de vista entró en la casa a por lo que ella le había pedido.
-Rex-llamó una voz aguda.
-Shaeeah-Dijo el soldado agachándose a la altura de la joven niña-¿No deberías estar durmiendo?-Preguntó suavemente.
-No puedo-Contestó ella en un susurro-Papa me contaba un cuento siempre antes de dormir.
Rex se paró varios segundos antes de contestar, aquello le partía el corazón, sobre todo por que él creía que Cut estaba muerto, ¿Pero como se supone que debía decirle que su padre no iba a volver? No podía.
-Pronto volverá-Se obligó a decir, odiándose por darle aquella falsa esperanza.
La cara de la niña pareció iluminarse ante lo dicho y con más energía preguntó.
-¿Iréis a buscarle?
-Si-Contestó Rex con firmeza-Ahora sube a dormir, antes de que tu madre vea que no estás.
-Ella está bañando a Jek, tardará en salir-Dijo ella.
-Arriba-Dijo él con tono divertido ante el intento de Shaeeah por quedarse más rato.
Cuando la vio subir cogió la comida y salió en dirección al granero.
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What about us
FanfictionAhsoka miró al frente, ahí estaban los cascos de sus amigos, los cuales habían sido enterrados. ¿Por qué todo debió acabar así? Con tristeza abrió su mano y dejó caer su sable para así girarse hacia la única forma de salir del planeta, Rex la espe...