「𝘉𝘳𝘢𝘵𝘵𝘺 𝘉𝘪𝘵𝘤𝘩.」• 𝙏𝙤𝙪𝙮𝙖 𝙏𝙤𝙙𝙤𝙧𝙤𝙠𝙞

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Era de 1:00 a 2:00 a.m, estabas sentada dentro de un callejón y rodeada de hombres que habían intentado atacarte, te habías hecho cargo de ellos y tu particularidad te dio bastante ventaja.

Estabas jugando en tu celular a un nuevo juego que había salido hace poco "Heroes Adventures" el nombre era patético, pero te entrenenian bastante los juegos de simulación o RPG.

El juego trataba sobre héroes conocidos como, All Might, Endeavour, Eraserhead, Miruko y muchos más que podías desbloquear y usar.

Los héroes debian ir por diferentes obstáculos para salvar a ciudadanos que se encontraban atrapados al final de cada nivel, eran varias secciones, y cada una contenía 10 niveles... 9 ciudadanos que salvar y un jefe final, era un juego originalmente en honor a la carrera como héroe de All Might, pero poco a poco añadieron más héroes.

Tal como con los héroes, el juego también contenía villanos conocidos algo que te gustaba bastante, pero por el hecho de que el juego incluye a villanos que han cometido variedad de delitos no estaba disponible en tiendas físicas, ni tiendas online y si lo estaba, el juego estaba prohibido para menores de 23 años, pero tú lo has descargado ilegalmente.

Por ahora te encontrabas atascada en el tercer mundo, salvar a los ciudadanos siempre era fácil... pero los jefes finales, obviamente, siempre eran difíciles.

Ahora te encontrabas peleando contra 'Blueflame' o también 'Dabi' un villano que lanzaba llamas azules como un loco.

Mientras jugabas y pérdias una y otra vez un cuchillo cayó a tu lado.

Escuchaste a una voz femenina quejarse.

―Aw... Vamos estaba tan cerca...

―¡No te preocupes Toga! Lo harás mejor la próxima vez.

Miraste arriba y te encontraste con dos personas, una chica rubia de unos cuantos años menor que tú y otra persona con un traje que cubría todo su cuerpo.

Estabas acostumbrada ya que la mayoría del tiempo pasaba... muchas de las personas que se metian contigo, eran villanos, y se debía a que te gustaba salir de noche.

Tomaste tu mochila en donde llevabas cosas como audífonos y bebidas, dispuesta a salir del callejón te levantaste e ignoraste a las personas que se encontraban arriba.

Cuando volteaste a ver si se encontraban encima de el edificio aún, notaste que era como si hubieran desaparecido.

Seguiste tu camino, y justo cuando ibas a salir del callejón...

―¡Oye! Ignorar a alguien es de mala educación ¿sabias?

Dijo la persona en traje, que por su voz probablemente era un hombre.

―No te preocupes Twice, la haré pedasitos para que aprenda sobre modales.

La rubia con cabello recogido empezó a reír histericamente.