Diario de un monstruo

Capitulo 10: La primera prueba

Capítulo 10: La primera prueba

La noche solo esconde a quienes viven en ella, caminar sin ser visto…dominar la oscuridad que hay en ti… así es como Lucius me hablaba de su arte. Quizás eran las únicas palabras que me dignaba a escuchar, una vez mientras entrenábamos bajo las sogas dijo “Si escondes la daga jamás sabrán que han muerto”, a lo que Grim le respondió “tendrás tiempo de sobra para esconderla en tu tumba”.

Grim se lanzaba contra los espantapájaros rápidamente y sin apenas un segundo movimiento los destrozaba, nunca vi a Lucius tocar uno de esos espantapájaros, era una persona seria y sensata, la clase de persona que antes de dar un paso sabe cuál vas a dar tú. Grim era una bestia malhumorada con un especial odio hacia mí y una predilección hacia el oro ajeno, nunca se quitaba su armadura, siempre tenía el orgullo en la mirada y una mano sobre la espada.

Cuando llegaba el ocaso todos los hermanos se reunían en la sala principal para recibir  órdenes. Las drogas llegaban al puerto de la ciudad escondidas como mercancías de los mercaderes que luego el gremio vendía en las poblaciones cercanas, siempre un pequeño grupo de hermanos se quedaba como guardias aun que los soldados del rey ni siquiera imaginaban lo que escondía el suelo bajos sus pies, mientras que los restantes recibían encargos especiales directamente de Grim. No fue hasta la séptima noche que Grim nos hizo llamar a su habitación.

Cuando entré, Lucius Grim y dos hermanos más observaban un mapa amarillento.

-  ¿Seguro que son de confianza? – pregunto Grim con su típico carácter

- Si,  en esta parte de aquí hay una puerta levadiza,  la rueda para subirla está rota pero no pesa tanto, podemos levantarla para entrar. –Respondió Lucius señalando un punto

- Magnifico, entended bien todos porque no tengo ganas de repetirlo…- Me apoye en la pared mirando al suelo con los brazos cruzados mientras Grim continuaba- Entraremos a media noche,  nuestro objetivo es robar un Libro llamado “Grimorio de Kabeel”

- ¿¡Vamos a entrar en el palacio real solo por un libro?!- interrumpió uno de los hermanos asustado mas no tanto como cuando Grim le respondió con la mirada

- ¿Algo que objetar? –Pregunto desagradable- No olvides quien manda aquí, ese Libro vale más que tu propia vida. – El hermano asustado dio un paso atrás, Lucius como siempre mantuvo su seria expresión- No estamos seguros si lo  tienen en la torre este u oeste , así que Lucius y vosotros dos pasareis por las mazmorras, habrá guardias pero seres tres y estaréis a oscuras con lo que podres subir a la torre este por aquí. Niño. –Me acerque a la mesa para verlo bien- ¿ves esta zona de aquí? Tú y yo pasaremos por el patio, entre estos muros hay una pequeña obertura, eres el único que puede pasar por ahí y abrir la torre oeste desde dentro para mí. ¿Entendido?

-Si...

- Si en lo alto de la torre no está el libro iros, no podemos arriesgarnos a que sepan quienes han entrado. Por ultimo si alguien es capturado recordad la primera ley del gremio, no se traiciona un hermano, el gremio de ladrones debe seguir siendo un secreto.