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Muy bien, quizá ya había sido suficiente.

Grumpy no era una persona demasiado... Paciente, todo lo contrario, lograba sacarse de quicio con facilidad cuando algo no le gustaba, y digo, ¿A quien no? Creo que todos estamos de acuerdo que con nuestras pasiones somos muy empeñados y pacientes, sin darnos por vencidos a la primera vez que fallamos.

Esa vez Grumpy estaba en su límite, realmente estaba muy fuera de este.

Quien sabe cuántas veces le había preguntado indirectamente si quería salir con el, y cuando por fin logró hacerlo de forma directa, Funshine no lo tomó como si fuese una cita, simplemente pensó en una salida de amigos eso es todo.

Ya habían pasado más de ocho meses con esa infernal rutina, en ese momento estaban en una "salida de amigos" aunque Grumpy parecía realmente irritado en esa ida dónde al chico nuevamente se le había ocurrido invitar a Tender y a Love-a-lot.

Aquella pareja iba detrás de ellos, evitando los cariñitos para no incomodar a nadie, simplemente hablaban de trivialidades, entre ellas el pelaje de Funshine que era suave y bonito, más que cualquier otro pelaje en todo quiéreme mucho.

Grumpy por otro lado solo miraba hacia otra parte, dejando que el helado que le había comprado Funshine se derritiera en su mano, estaba molesto y no quería hablar.

El rubio notó esto, acercándose al chico de forma algo preocupada mientras señalaba el pobre helado de chocolate, medianamente derretido y con el dulce pegado al pelaje del oso gruñón.

— O-Oye Grumpy... — Llamó, algo dudoso por la mirada que este le daba, era algo inexpresiva, por lo tanto, era difícil decifrar que pensaba.

— ¡E-Eres un pendejo!— Respondió el de pelaje azulado, tirando el helado en un bote de basura cercano para luego quitarle la botella de agua a Tender y lavarse la mano con esta, tirándole la botella de vuelta, mojando su pelaje.

Los tres osos restantes solo se encontraban demasiado confundidos, nunca se hubieran esperado aquel comportamiento por parte de Grumpy (Quizá un poco pero no de imaginaban que este insultaria a Funshine).

— Eres un total pendejo, llevo meses pidiéndote que salgas conmigo, ahora mismo pensé que podíamos tener algo romántico pero no podemos con esos dos pegados a nosotros porque tuviste la genial idea de invitarlos sin preguntarme primero.— Regañó, y aunque se notase molesto no gritaba, solo alzaba levemente la voz.

Ambos osos solo fruncieron el ceño y Funshine hasta ese punto solo podía ponerse todo rojo, avergonzado de darse cuenta que aquellas indirectas eran realmente indirectas, era algo inesperado pero lo fue aún más cuando sintió unos labios pegarse a los suyos, además de su chaqueta haber sido jalada hacía abajo, abriendo los ojos de manera impresionada al ver a Grumpy y el leve color púrpura de las mejillas de este

Lo siguiente que pasó fue que Grumpy tuvo que sostener a Funshine por los hombros, llevándolo hasta el banco más cercano ante la mirada preocupada de Love-a-lot y la mirada molesta de Tender aunque no podía importarle menos.

Cuando Funshine finalmente recobró sus sentidos solo pudo aceptar que aquella tarde podía llamarse "cita doble" además de aceptar tener mucho más con el oso gruñón.

Grumpy sintió la verdadera felicidad cuando escucho aquello de los dulces labios de su rubio que solo pudo volver a besarlo, aunque está vez en la mejilla aora evitar que se le bajara la presión.

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Muero de sueño-

-Alexandra.

Cortos. [Grumpy x Funshine]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora