Jennie intentaba cumplir su palabra de esperar a que Lisa volviera para intentar hablar con ella; ya habían pasado casi dos semanas desde que la rubia estaba fuera de Nueva York, cada noche Jennie le enviaba un mensaje que siempre terminaba en un "Los amo", en todos esos días la coreana solo salía de su departamento a su trabajo y viceversa, no tenía ánimo para nada.
Ahí estaba, un viernes por la tarde, terminando algunos asuntos de su trabajo y de sus pacientes, ordenaba un poco su escritorio par irse a su departamento y como todas las noches enviarle un mensaje a su bailarina y esperar que ella lo respondiera.
-Hasta mañana Tzuyu - salió de su consultorio con su portafolio en mano.
-¿Trabajaras mañana? - pregunto la secretaria, Jennie detuvo la puerta y la miro confundida - Mañana es sábado - dijo esperando una respuesta, solo negó con la cabeza- Los sábados no trabajas -
Jennie intentó sonreír.
-Tienes razón, que tengas buen fin de semana - se despidió y salió del edificio.
En otras circunstancias habría salido mucho más temprano para ir a buscar a su bailarina a la academia y hacer cualquier cosa que se le ocurriera a la rubia, sin embargo ahora solo se fue directo al departamento a encerrarse en el durante todo el fin de semana. En cuanto entro dejo sus cosas en la mesa y se tiro en el sofá, solo quería dormir y esperar a que cuando despertara todo fuera como antes; el departamento era un desastre, ropa por todos lados, algunos trastes sucios en la cocina, todo un desorden; cuando el sueño la iba venciendo el sonido del timbre la despertó, al parecer era algo importante porque tocaban con demasiada insistencia, a pesar de no querer levantarse y abrir, el ruido era demasiado, sin mucho ánimo y algo molesta se levanto.
-¿Por qué demonios...- Abrió rápidamente para despedir a quien estuviera tocando de esa manera pero no pudo terminar porque era una Irene apresurada entro al departamento.
-¡a mi también me da gusto verte! - dijo la pintora entrando a la sala, fue directamente a sentarse al sofá -¿Piensas quedarte ahí? - grito
Jennie empujo la puerta con fuerza y regresó al sofá, ni siquiera miro a su amiga simplemente se tumbo y cerro los ojos para volver a intentar dormir.
-¡Jennie! -
-¿Qué quieres?
-¿Qué quiero? - Jennie la miro sin decir nada - En unas horas es la exposición de mis cuadres, te lo dije hace un tiempo - volvió a mirar a su amiga que solo llevo una mano a su frente - Así que te bañas, te arreglas - se puso de pie y camino hacia la habitación no sin antes observar el desastre en el departamento - ¡Deberías limpiar!
La coreana se puso de pie y camino hacia su habitación, ahí estaba Irene sacando ropa de su armario y arrojándola sobre la cama.
-¿Qué prefieres? pregunto la pintora sosteniendo un conjunto de pantalón y saco negro, y en la otra un vestido rojo, los miro por un momento y sonrió. - Este - coloco el vestido sobre la cama.
-No he dicho que iré - la coreana estaba sentada en su cama.
-Vamos amiga - Irene se sentó junto a ella - Tienes que salir de aquí, divertirte un poco, conocer gente, no solucionaras nada encerrada aquí... Además, Seulgi acepto ir y te necesito ahí.
-Sabía que había algo más - dijo entrecerrando los ojos - la extraño demasiado-
-Lo sé - Irene abrazo a Jennie con fuerza, el apoyo de la pintora siempre había sido incondicional.
Jennie se puse de pie y camino hacia el baño - ¡Te veo allá!
Mientras tanto en Tailandia, una rubia con un pronunciado vientre caminaba por el centro comercial al lado de su madre; tal y como predijo Lisa, Malai ya se había encargado de armar un pequeño guardarropa para su nieto.
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Nueve meses -(Jenlisa Adaptación)-
FanfictionUna familia eso era lo que quería lisa Manoban, esposa e hijos, pero su novia Jennie lo encontraba totalmente innecesario, su familia era Lisa y con eso bastaba. Luego de un tratamiento algunas cosas van a cambiar en su relación. (Adaptación, la His...