Nueve meses -(Jenlisa Adaptación)-

Capítulo 23 (parte II)

-¿A dónde vas? - preguntó firmemente la instructora, la coreana se detuvo sin voltear - Es verdad, fuiste un completo desastre... - Jennie se volteó, no estaba de humor como para soportar algún otro comentario de esa mujer - Déjame terminar... No lograste hacer tres sencillas cosas, además que no me ayudaste a relajarme mientras tocabas mi falso vientre - el rostro de Jennie mostraba tristeza - Sin embargo... Jennie, será una buena madre y no necesitas un tonto diploma - La castaña la miro sorprendida, Shanon le dio una cálida sonrisa - Tu hijo solo necesita de tu amor. Y eso, estoy completamente segura que lo tiene desde el primer momento que supiste de su existencia, solo estabas asustada - sonriendo le extendió a Jennie su ansiado diploma, la castaña estaba que no se lo creía y no pudo evitar sonreír - No dejes que el miedo se más grande que el amor por tu familia.

Jennie tomó el diploma y lo observo, suspiro y volvió a sonreír por las palabras de aquella mujer - Gracias - susurro conmovida, no necesitaba ese papel, solo quería pasar el resto de su vida junto aquella rubia bailarina y con su pequeño Tae, deseaba poder aprender junto a Lisa y vivir esa aventura de la maternidad, como le decía su chica, sorpresivamente para la instructora Jennie le dio un fuerte abrazo.

-¿Por qué me hiciste correr en el parque? - preguntó arqueando un ceja mientras caminaban a la salida del edificio.

-Solo quería divertirme - dijo encogiéndose de hombros.

-Pagaré los muñecos. - Shanon sonrió

-No te preocupes, no ha llegado quien rompa el récord de cinco bebés robots en una sesión de Kim Jisoo - Jennie solo abrió los ojos y acto seguido ambas rompieron en una sonora carcajada.

La agencia de autos de Jisoo era reconocida en la ciudad, sobre todo por sus grandiosas promociones y por la atención personalizada de la propietaria. Jennie caminaba por la agencia en busca de la pelinegra de ojos oscuros pero no la lograba encontrarla, además que los empleados vestían curiosos disfraces de Halloween, mientras intentaba localizar a la pelinegra observaba las camionetas familiares de habían, una llamo su atención, primero por el color negro y porque se veía espaciosa, comenzó a observarla, acarició lentamente el exterior y se acercó a una de las puertas para abrirla, sonrió cuando la vio por dentro, tenía el espacio perfecto para una familia grande, además que tenía el lugar adecuado para colocar una silla de bebes.

-Es una Chevrolet Orlando - escucho una voz detrás y rápidamente volteo, frunció el ceño pero cuando se dio cuenta quien le hablaba solo atino a llevarse una mano a la boca para no reír - Ideal para familias extensas - termino de hablar la pelinegra que vestía un disfraz de vampiro, su cara cubierta de una pintura blanca, un delineador negro en sus ojos y unos colmillos dibujados en su boca.

-¿Kim? - la pelinegra sonrió y asintió.

-¿Cómo te fue con Shanon?

La castaña no pudo evitar sonreír ampliamente, sacó de su bolso su diploma.

-Esa mujer está loca pero es muy sabia, ¿Qué haces vestida así? - guardo su diploma y señalo a la pelinegra.

-Es por la temporada ... Y bien - señalo la camioneta - ¿Te la llevas?  - miro a la coreana que volvía su vista a la enorme camioneta - Es una de la más seguras, con mucho espacio para la familia. 

Jennie no pudo evitar sonreír, le agradaba como sonaba esa palabra y no pudo evitar imaginar futuros paseos con su bailarina e hijo en esa camioneta, miro a Jisoo y entrecerró los ojos.

-¿Aceptas autos a cambio? - pregunto sonriendo y viendo las llaves de su convertible en su manos, Jisoo solo asintió mientras sonreía con esos extraños colmillos dibujados en su rostro.