Jess
—¿Me puedo sentar? —Pregunté.
Elliot reaccionó y guardo sus dibujos.
—Claro—Dijo sentándose mejor y dándome un espacio.
Me senté a su lado y sentí como se tensaba.
—¿Cómo supiste donde estaba? —Giró su cabeza para mirarme.
—A mi amiga se le salió el "secreto"— dije entre comillas.
Él empezó a reír, haciendo ver hoyuelos en sus mejillas.
Me sonrojé.
—¿Qué estabas dibujando? —Pregunté.
Me miró un poco incómodo.
—No, no importa si no contestas. —Dije rápidamente.
Me miró, sacó el cuaderno y me lo entregó.
—No es un cuaderno para dibujos, pero lo ocupo para no gastar el otro. —Explicó.
Abrí y vi algunos de los primeros dibujos, cada vez que pasaba las hojas me quedaba todavía más asombrada, eran hermosos, cada línea estaba perfectamente ubicada.
Los colores parecían sobresalir del cuaderno, pero los últimos estaban hechos a lápiz, en blanco y negro, era un rostro.
Mi rostro.
Levanté mi rostro sonrojado y lo vi, estaba observando al otro lado y parecía muy incómodo. Decidí ignorarlo.
—Son muy hermosos—Dije sincera.
Giró su cabeza y me miró.
—Gracias—Dijo.
Estuvimos hablando durante un tiempo, pude darme cuenta que esa tensión que había en el ambiente desaparecía, sin darme cuenta cerré mis ojos y me quedé dormida.
Sentí un olor, olía como...
¿Perfume de Hombre?
¿Qué?
Abrí los ojos y entonces me di cuenta de que estaba en el hombro de Elliot.
Estaba dormido, se veía muy tierno casi como para sacarle una foto.
Casi.
Tomé mi mochila y busqué mi celular.
01:37 AM
Abrí mis ojos asombrada.
Intenté despertar a Elliot moviendo su brazo.
—Elliot—Dije.
Nada.
—Elliot—Hable más alto.
Frunció las cejas.
—¡Elliot! — Grité, agitando aún más fuerte su brazo.
Abrió los ojos asustado y un poco desorientado miró alrededor y luego a mí.
—Son casi las dos de la mañana—dije.
Me miró un poco extrañado.
—¿Y? —Preguntó.
—¡Estamos en la Universidad de noche y mis padres no saben dónde estoy y me matarán! —Respondo.
—Ya tienes 20 años, no necesitas darle explicaciones—Dijo simple.
—Ya, ok, no necesito darle explicaciones, pero tenemos que salir de aquí. —Conteste exaltada.
—No te preocupes, es fácil— Responde mientras levantaba sus hombros.
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A Través Del Arte
Teen FictionDos personas. Dos opciones. La primera, se vuelven cercanos. Y la segunda, se ignoran y nunca podrán saber que hubiera cambiado si se hubieran dicho una simple palabra. Bueno, en esta historia pasa la primera opción... ¿Ellos se podrían destruir...