One-shots De SSS y Tú.

★Secretaria Malvada★

Pasaste a la siguiente hoja de tu revista de modas suavemente. Realmente no tenías mucho interés en el último grito de la temporada de primavera, pero por lo menos así podías pasar el rato mientras continuabas con tu espera.

Hacía hora y media que te habías sentado en este sofá con las piernas cruzadas, esperando pacientemente a que llegara tu turno en la fila. Habías llegado a esta especie de "isla-fortaleza" junto con un grupo de personas, con la intención de participar en una entrevista de trabajo.

El cómo llegaste hasta aquí era una historia simple. Dos meses atrás renunciaste a tu antiguo empleo como cajera en esa línea de restaurantes de comida rápida desagradables llamada "Meh Burguer" (Ugh, incluso el nombre era desagradable). Habías trabajado en el turno nocturno de allí durante casi cuatro años seguidos y te lo habías aguantado bien. Solo sentarte allí y esperar a que algún loco o sonámbulo viniera a parar por una de esas hamburguesas horribles con sabor a papel maché y pegamento. Nada que no pudieras tolerar por tu paga.

Eso, hasta que recortaron tu salario.

Naturalmente te quejaste y exigiste una explicación por ese sinsentido, recibiendo como respuesta que el estúpido de tu jefe gastó un buen dinero apostando en las peleas robóticas y ahora necesitaba reponerlo. Si lo que te daban ya era poco más que una miseria, lo que te iban a dar después de ese corte no te alcanzaría ni para comprarte una hamburguesa en ese mismo local (hablando en metáfora, ya que ni aunque tuvieras algún tipo de daño cerebral comprarías y aún menos consumirías la comida de esos establecimientos). Así que mandaste a tu jefe al demonio y renunciaste.

Ya estando fuera de esa liga, te propusiste a buscar otra, naturalmente. Tristemente como estaban las cosas en la actualidad, buscar un trabajo era como buscar una aguja en un pajar. Ninguno era lo suficientemente decente para una persona que vive sola y sin ningún tipo de familia. La mayoría eran cosas degradantes y con paga terrible. No te quedó de otra que sobrevivir de tus ahorros mientras seguías buscando.

Y después de un largo tiempo casi estuviste a punto de rendirte y arrojar la toalla. Sin embargo, encontraste tu posible salvación.

Habías salido de tu última entrevista de trabajo en una villa rarita llamada "Villa Erizo" (no te pareció el mejor de los nombres, pero en fin). La entrevista era para ser asistente del alcalde, pero no obtuviste el puesto. Te quedaste paseando por la zona con algo de desánimo hasta que te topaste con un cartel impreso en uno de los muchos postes.

El cartel decía que se solicitaba ayuda. Más específicamente que se necesitaba de un "Secuaz malvado". No entendiste bien que demonios quiso decir el autor con eso, pero te encogiste de hombros al ver lo que te ofrecerían si eras contratada. Ni más ni menos que una buena paga, asilo y tres comidas al día si se aceptaba para ser empleado a tiempo completo.

Te venía como anillo al dedo. Sin un trabajo te encontraste con el problema de no poder pagar el alquiler de tu casita y de que tarde o temprano, se te acabarían tus ahorros. No perdiste el tiempo y te dispusiste a ir de inmediato a arreglarte a tu casa para después ir al lugar asignado en el cartel donde se harían las entrevistas.

Así, tomaste un bote a esta pequeña isla junto con otros con la esperanza de conseguir el empleo. Al llegar, fueron guiados por un par de robots un poco extraños, pero amables, a esta sala de espera.

Desde entonces te encontraste esperando a que llegara tu turno mientras cada tanto llamaban a alguien. Lo curioso al principio fue que los que entraban no salían, a saber por qué. Pensaste que tal vez hubiera otra salida allí adentro donde se supone estaría la persona que te entrevistaría, pero pronto te diste cuenta al mirar por la ventana que no era así… o más o menos.