𝙍𝙚𝙘𝙪𝙚𝙧𝙙𝙤𝙨 𝙙𝙚 𝙪𝙣𝙖 𝙣𝙤𝙘𝙝𝙚 𝙙𝙚 𝙫𝙚𝙧𝙖𝙣𝙤 - SOOSHU

Capítulo 29: En voz alta

Shuhua se moría de los nervios que tenía aquella mañana de finales de febrero. Después de haberle dado demasiadas vueltas, como aquel día entraban más tarde, había citado a sus amigas a tomar algo antes de entrar a clase. No les había dicho nada más, solo que quería aprovechar la oferta de desayunos que había en la cafetería cercana a la facultad, pero todas sus amigas, aunque no lo hubieran dicho entre ellas, sabían que se tramaba algo entre manos y no tenían muy claro si era bueno o no. Aun así, no podían evitar preocuparse.

Así que, cuando al principio del desayuno, la morena se mostraba de la misma manera que siempre, como si nada raro hubiera pasado, sus amigas se empezaron a mirar entre ellas, diciéndose sin palabras lo que pensaban: que aquello no era normal y algo raro estaba pasando. Finalmente, después de demasiados juegos de miradas intentando decidir quién debía ser la primera en hablar, Yuqi solamente resopló y decidió dar el primer paso, ya que sus amigas no pensaban hacerlo.

- A ver, Shuhua ¿qué está pasando? – la morena levantó la vista de su plato para dirigir sus ojos a su amiga al otro lado de la mesa, quien se había cruzado de brazos.

- ¿De qué hablas? Solo estoy tomando mi desayuno, no pasa nada. – dijo Shuhua, haciéndose un poco la loca, lo que molestó a Miyeon, quien fue la siguiente en hablar.

- Shuhua, sabemos que algo está pasando. Si no, no nos habrías juntado a todas a estas horas de la mañana.

- Cuando podría estar durmiendo. – soltó Ryujin, bostezando. Lia no pudo hacer otra cosa que golpearle el brazo.

- De verdad, creo que sobraba el comentario. – a continuación, bajó ligeramente el tono de voz, pero sus amigas pudieron escucharla perfectamente. – Además, alguien anoche no quiso juntarse a una hora decente por...

- Bueno, ya está bien. – la interrumpió Yeji, no queriendo saber demasiado sobre la vida sexual de sus amigas. Giró su cabeza para dirigir su mirada a Shuhua. – A ver, sabemos que algo está pasando y no creo que ninguna vaya a presionarte si no quieres contar nada. – miró a sus amigas, quienes asintieron con firmeza, dándole la razón. – Pero también nos preocupa que no nos lo quieras decir. No creo que ninguna aquí te vaya a juzgar, sea lo que sea.

- Pero es que creo que sí me vais a juzgar por esto. – dijo Shuhua, tímidamente y bajando su mirada de la pelirroja a sus manos.

- Yo creo que no. Puede que al principio puede que no lo entendamos, pero, al final, somos amigas y te vamos a apoyar en lo que sea. – Miyeon la intentó apoyar, pasando su brazo izquierdo por los hombros de la morena. Esta emitió un suspiro y la miró.

- Espero que lo entiendas. Creo que puedes llegar a entenderlo. – la castaña frunció el ceño.

- ¿Por qué ella y no nosotras? – preguntó Yuqi. Miyeon, sin embargo, creyó haber entendido lo que estaba pasando, pero no quería decirlo en voz alta porque no era lo que debía hacer. Así que agradeció que fuera Shuhua quien lo dijera en voz alta a continuación.

- Porque estoy saliendo con Soojin. – dijo, finalmente, la morena.

El tenso silencio que se hizo entre las amigas puso de los nervios a Shuhua. Debería haberse imaginado que esa sería la reacción que recibiría, pero, viviéndolo, era completamente diferente. Sabía lo que iban a decir a continuación, así que prefirió adelantarse antes de que lo hicieran sus amigas.

- Sé perfectamente lo que estáis pensando, que Soojin es mala persona y que se ha comportado mal conmigo y que a qué santo se me ocurre salir con alguien tan odiosa. Y es cierto que empezamos fatal. Ninguna quería ver a la otra y tenéis toda la razón en pensar que esto no puede salir bien. Pero es que no he podido evitarlo. Realmente, desde el principio sentí que me atraía, pero, al odiarla tanto, se me confundían los sentimientos. Pero, a medida que he conocido más quién es y por qué a veces se comporta como lo hace, mis sentimientos han ido a más y me gusta mucho. Debo deciros que se ha disculpado conmigo en repetidas ocasiones por haber pagado conmigo cosas en las que no tenía nada que ver. Incluso fue ella la que convenció a Soyeon de que esta se portara mejor con nosotras y el resto de la clase. Está cambiando para ser mejor persona y me lo está demostrando no solo con palabras, sino con hechos. Sé que no estáis totalmente convencidas y que tenéis que verlo por vosotras mismas, pero espero que, una vez empecéis a conocerla, entendáis por qué me gusta tanto y por qué quiero estar con ella. Eso sí, me gustaría que esto se mantuviera entre nosotras de momento. Hay cosas que ninguna de las dos podemos controlar y son complicadas ahora mismo, pero ya sabéis lo que pasa, que era lo que yo quería, porque no podía seguir ocultándolo. – una vez hubo terminado de decir todo aquello, las chicas siguieron callas. Estaban bastante tensionadas en aquel momento con la situación y no sabían que decir. O, mejor dicho, sabían lo que querían decir, pero esto solo complicaría las cosas. – ¿No vais a decir nada? – preguntó Shuhua, cuando, pasados unos minutos, el silencio la estaba matando.