Han JiSung es un joven adulto que ha vivido veintidós años de su vida privado por completo de uno de sus sentidos: La vista. El nació siendo ciego, por lo que cree que no es feliz, debido a las contantes burlas a su alrededor e incluso por algunos c...
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Caminamos entre los túneles de las alcantarillas durante una hora completa sin encontrar alguna salida que no es tuviera bloqueada por infectados o por candados por fuera. A medida que avanzábamos, el olor de las aguas sucias se estaba haciendo más fuerte a tal punto de que tuvimos que taparnos la nariz con un paño.
Todos íbamos en silencio, lo único que se podía escuchar era el sonido de la lluvia cayendo arriba de nosotros.
Durante todo el tiempo que estuvimos caminando, JiSung jamás se despegó de mi. Tenía su mano bien agarrada contra la mía y de vez en cuando podía sentir como me daba leves apretones y suaves caricias que me estaban calmando lentamente del esfuerzo fisico que hice hace rato.
Oí a unos metros en alguno de los túneles como si el agua estuviera corriendo hacia algún lado y me llamó la atención, ya que posiblemente podia ser la salida hacia algún lago.
Caminé un poco más rápido y acerté. Por fin había una salida hacia un rio de uno de los túneles.
- Vamos por ahí -Dije y caminamos todos juntos hacia la salida. Apagué la lámpara de mi celular en cuanto salí de ahí y los demás hicieron lo mismo. Era un pequeño río que apenas y la altura del agua me llegaba a los tobillos. Y alrededor había un externo bosque que desconocía por completo.
- ¿Ahora hacia dónde? -Preguntó JeongIn deteniéndose a mi lado.
- No lo sé, no conozco este bosque. Temo que nos hayamos alejado demasiado de nuestro destino...creo que estamos perdidos, a menos que volvamos y tratemos de salir por alguna de las alcantarillas donde había infectados.
- No, prefiero ya no encontrarme esas mierdas durante un buen rato -Dijo Felix con una mueca-. Deberíamos buscar algún lugar para descansar un poco, son..las dos de la mañana y de verdad estoy muy cansado.
— Si logramos encontrar alguna cueva o una cabaña descansaremos. Hay que avanzar —Dije agarrando de nuevo la mano de JiSung para comenzar a caminar por el rio. Todos comenzaron a seguirme en silencio, lo único que se oía eran nuestras pisadas sobre el agua y de vez en cuando, unos suspiros de cansancio de parte de todos.
Volteé a todos lados buscando alguna señal para poder salir de ahí, pero todo era tan desconocido que me daban ganas de tirarme al suelo y quedarme ahí hasta que alguien viniese a rescatarme.
— Tengo hambre... —Susurró JiSung.
— Debes esperar un poco, ¿si? —Dije acariciando sus dedos y él asintió—. Chicos, miren.
Señalé lo que parecía ser una cueva.
— Esperen aquí —Dije soltando la mano de JiSung para caminar a la cueva con sigilo. Encendí mi lámpara y alumbré un poco el lugar. Estaba vacío y no muy profunda, perfecta para descansar ahí—. Está vacía, si traemos unas cuantas ramas grandes de árboles, podemos camuflarnos en la oscuridad sin que algún infectado nos vea.
