c u a t r o

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Hannah despertaba luego de cuestionables horas de sueño, había olvidado lo que se sentía faltar a la escuela. Bostezó con fuerza al tiempo que estiraba sus brazos. La venda en su frente empezaba a molestar, y la verdad dejó de doler hace un tiempo. Vió alrededor notando la ausencia de aquellos dos aficionados. Entrecerró los ojos al darse cuenta que su vista aún no estaba del todo acostumbrada a la poca luz que ingresaba al lugar.

Tomó su teléfono e inmediatamente un montón de nuevas notificaciones se asomaron en la pantalla de bloqueo. Era su madre, otra vez. Fijó su mirada y pensó en llamarla, en escribirle o decirle que estaba bien, pero tenía miedo, no quería exponerla, no quería exponerse a ella misma. No haría nada sin el consentimiento de esos drogadictos.

Realmente Hannah nunca dejó de cuestionarse si los medios de comunicación mentían acerca de los Agma, ella creía que era un invento del gobierno para ocultar la gran cantidad de homicidios sucedidos últimamente en la capital, ya que claramente les afectaba en todo ámbito. Pero luego de ver a su amiga, Yuna, con aquella mirada ansiosa y tenebrosa, con ese intenso color rojo sobre ellos, todas sus hipótesis desaparecieron en un instante.

Y ahora que recién despertaba, con un montón de dudas en la cabeza, le hubiera gustado saber el cómo fue salvada de su muerte, el cómo sabían que estaba en peligro. Sacudió su cabeza, y buscó con la mirada algo de comida; recordó que todo lo que había era fideos instantáneos para el desayuno.

(...)

Minho caminaba rápidamente al establecimiento de la peliazul, de cierta forma sentía algo de empatía; aunque a qué estudiante le gustaría seguir yendo a la escuela, incluso si su justificación es estar al borde de la muerte.

Su idea era simple, hacerse pasar por un manager de una empresa recién formada que contrató a Yeong Hannah para debutar pronto como solista. En su mente sonaba bien, pero la verdad no tenía idea cómo funcionaban esas cosas. Tendría que averiguar.

(...)

CCA (Comisión Contramedidas Agma) 15:51

Sentado en su escritorio, mantenía la cabeza apoyada en ambas manos mientras pensaba en cómo finalizar su informe. Llevaba casi dos años intentando averiguar acerca del origen, y sólo concretaba dar con el primer caso. Sus últimos reportes sólo enunciaban características y necesidades, quería dar con aquello que le faltaba. ¿Fueron parte de un experimento fallido? ¿Acaso Dios fue capaz de crear una criatura para acabar con los humanos? ¿Cuál es su forma de reproducción? El oficial Park estaba aburrido, ser de bajo rango no le permitiría saber más allá. Investigaría por su cuenta, y empezaría desde el principio; donde todo comenzó.

(...)

Minho quedó asombrado en el momento en que la directora aceptó felizmente el acuerdo entre ambos. No supo si fue porque sus palabras sonaron convincentes o por apuesto que esa señora encontraba al joven; porque sí, no disimulaba en nada. Estaba contento por llevarle buenas noticias a la chica, aunque no sabía por qué. Una llamada lo sacó de sus pensamientos.

— Chan, ¿Todo bien? — Habló primero, acercando el celular a su oído.

— Sí, ellos están bien, Seungmin se encargó de dejarlos fuera de todo. Ese niño es demasiado inteligente. — Suspiró.

— Ojalá pensara también en sí mismo. O muere por falta de alimento o descubren que es un demonio y experimentan con él. La verdad, no sé qué es peor.

— Encontrará una manera de salir de esta, estoy seguro. — Comentó positivo. — Por cierto, los chicos lograron llevarse un par de provisiones más, suficiente para que puedan vivir tranquilos un tiempo.

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