Odio Amarte Tanto

~Segundo Encuentro~

Después de lo ocurrido con Colette, no se sorprendió de no verla en el trabajo al día siguiente, afortunadamente, no había eventos programados por lo que podría irse temprano hoy. Hasta su bufanda estaba preocupada por Colette ya que se aferraba a la zona de la chica cada vez Edgar pasaba por allí.

-Bien... Vayamos por Colette... -Dijo suspirando un poco mientras la bufanda parecía darle una "Caricia" en la cabeza como agradecimiento.

Recogió un par de cosas y fue a la casa de su compañera. Se imaginaba todos los escenarios posibles, con Colette había que estar preparados para todo. Desde que seguía con el corazón roto hasta verla "vigilando" a otro Brawler... Pero nunca se imaginó el verla abrazando a Byron del brazo, con total confianza...

-Esto es algo que no se ve todos los días... -Pensó el muchacho viendo a Colette sonreír con cariño a las caricias en la cabeza que el mayor le daba. Hasta su bufanda se sentía confundida a la vez.  

-¿Huh ... Colette... ? -Dijo acercándose donde ella.

-¡Edgar! -Soltó el brazo del mayor para abrazar al muchacho. 

Se sentía bien al ver a su amiga feliz, pero sentía algo tenso en el aire, y encontró la razón al ver la mirada asesina de Byron. Estaba demasiado claro que Edgar no le agradaba... Seguro seguía molesto por lo ocurrido en el bar de Barley.

-Viejo rencoroso... -Pensó.

-¡Estoy tan feliz de verte! -Dijo sonriendo con cariño. Byron solo rodó los ojos.

-Te veré luego querida... -Dijo palmeando la cabeza de Colette.

-¡Seguro! -Se acercó lo suficiente para darle un pequeño beso en la mejilla haciendo que el mayor sonriera levemente antes de irse.

-¿Qué ocurre entre ese viejo y tu?

-¿Celoso? -Preguntó divertida.

-De un viejo ridículo... Claro que no.

-¿Disculpa? -Alzó una ceja.

-Solo míralo... Su ropa... Es un viejo ridículo... Y molesto....

- ..... -Colette lo miraba fijamente.

-¿Quién se cree ese sujeto que es? 

Colette estaba furiosa y lo golpeó en la cara con fuerza, incluso su propia bufanda estaba confundida ante la repentina reacción de la chica.

-¿¡QUIÉN TE CREES QUE ERES TU PARA DECIR ESAS COSAS DE ÉL!? -Dijo furiosa comenzando a perseguir a Edgar. Cuando ella se enojaba, era la única chance para mantenerse con vida.

Edgar perdió la noción del tiempo huyendo de la chica, pero de algo estaba seguro, tenía hambre, por lo que decidió ir por Barley. Se movía con cuidado para que la chica no le encontrara, hasta la bufanda le ayudaba a moverse entre edificios, ya que su pasión era el Parkour.

-Gracias de nuevo por la ayuda. -Se escuchó cerca.

-¿Eh? -Edgar se escondió un poco.

-No hay de qué, mientras pueda ayudar. -Se escuchó la voz de Byron, sonaba... ¿Más alegre..?

-Byron... No me parece justo que hagas esto... Te arriesgas mucho para conseguir estas hierbas.. Y tú inventaste el tónico... Debes de llevarte algo del crédito. 

-Espera... -Se sorprendió un poco el menor- ¿Ese sujeto había creado el tónico que Barley usaba?

-Barley, querido amigo... Sabes que no hago estas cosas buscando dinero... Soy médico por vocación y mi prioridad es ayudar a las personas heridas... Si no confían en mi para que los cure, prefiero que consigan la cura de alguien que aprecien...