𝐖𝐞𝐚𝐤𝐧𝐞𝐬𝐬 / A Harry Potter fanfiction /

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𝚃𝙷𝙴 𝙱𝙾𝚁𝚁𝙾𝚆

— Después Crabbe y Goyle trataron de escalar un árbol, pensando que se librarían de mi, pero la rama de este se quebró y cayeron justo a mis pies— Contaba Malfoy mientras mordía una manzana verde.

Hace unas dos semanas que llegue a la Malfoy Manor. Es gigante y demasiado sofisticada, elegante nivel aterrador. Caminando por los hermosos jardines de esta Malfoy me relataba como había sido su infancia, aunque debo admitir que no estaba prestando mucha atención, mi mente estos ultimos días se perdía con facilidad.

— Entonces Dobby llegó avisando sobre el almuerzo haciendo que Goyle se asustase y resbalara sobre la fuente —Seguía el rubio.

Hace poco había recibido una carta de Dumbledore avisando que por alguna extraña razón necesitaba que fuera a la madriguera. La idea no me emocionaba demasiado, la estaba pasando bien en la Malfoy Manor, Cissy —como me dice que le puedo llamar— es una gran madre, pero bueno por otro lado esta el señor Malfoy que a excepción de su esposa es completamente amargado, me molesta como cada que puede hace sentir a Draco como si no fuese lo suficiente, ahora entiendo el porque de su comportamiento. No me siento con ganas de ir a la madriguera pero si lo pide Dumbledore debe ser necesario.

 —¡Chica!, ¿Acaso estas ignorándome? —Preguntó el rubio parando bruscamente nuestra caminata.

— No, para nada, ¿Cómo me atrevería a ignorarte? —Contesté sarcásticamente, saliendo de mis pensamientos.

— ¿Qué te sucede? —Preguntó sentándose en el césped a lo que imité su acción.

— Dumbledore me mando una carta, dice que me necesita en la madriguera para conversar sobre algunas cosas.

— Pero no puedes irte, iremos al mundial de Quidditch ¿recuerdas? 

— Lo lamento Black, debe ser importante.

— Bien, haz lo que te plazca entonces —Sin mas se levanto del suelo y camino hacía la mansión. Ya me había acostumbrado a sus desplantes, sabía como resolverlos. Me recosté en el césped y mire al cielo.

— ¿Cómo vez a este niño berrinchudo, mamá? —Pregunté al cielo en espera de alguna respuesta. Un trueno resonó en este haciéndome dar un pequeño salto del susto— Sí, yo pienso lo mismo —Me levanté y seguí la dirección en la que se había ido Black, debido a que el trueno anunciaba que podía llegar a llover.

— Querida ¿Qué paso con Draco? se le veía enojado cuando entró —Preguntó Cissy

— No puede controlarme y eso le molesta un poco —Contesté cerrando la puerta de la entrada de atrás de la mansión. Cissy soltó una pequeña risa y negó con la cabeza. Me sentía cómoda en esa casa, como si estuviese aquí desde siempre y eso no dejaba de extrañarme— Iré a que haga las pases conmigo.

Subiendo por las escaleras entre a una de las habitaciones viendo a Malfoy acostado en la cama boca arriba— ¿No vas a disculparte? —Pregunté mientras le aventaba una almohada en la cabeza.

— ¿Yo?, eres tu la que me va a abandonar y aparte dejarme plantado en el mundial de Quidditch —Contestó como es de su costumbre dramatizando todo.

— Sí, sí, ya sabemos que eres una barbie reina del drama. Ahora, me disculpo si tu te disculpas —Propuse después de sentarme en la orilla de la cama en la que el estaba acostado.