𝐖𝐞𝐚𝐤𝐧𝐞𝐬𝐬 / A Harry Potter fanfiction /

⁰⁰⁵

𝙸 𝙿𝚁𝙾𝙼𝙸𝚂𝙴 𝚃𝙾 𝙿𝚁𝙾𝚃𝙴𝙲𝚃 𝚈𝙾𝚄

— ¡DESMAIUS! —

— ¡PROTEGO! —

— ¡EXPELLIERMUS! —

— ¡GLACIUS! —

— Bien hecho Hydra. Ahora, descongélalo —La voz de Sirius se hizo presente.

— ¿Tan rápido se acaba la diversión? —Preguntó Bella recibiendo una mirada burlona de parte de Sirius— Bien. Finite incantatem.

En ese momento el cuerpo de Lupin se descongeló.

—Lo siento —Se disculpó Bella.

— No te disculpes, para el tiempo que llevas, vas bastante bien. —Lupin parecía decidido— Debemos comenzar con el Expecto patronum.

— Por ahora, ve a descansar, ha sido mucha practica por hoy, lo mereces —Habló Sirius guiñando un ojo sin dejar que Lupin rebatiera al respecto.

Bella salió de la habitación de ensayo hacía su habitación dejando a Sirus y Lupin atrás. Habían pasado tres semanas desde que salió de Hogwarts, el primer día que aceptó unirse a la orden mando a Viribus para llevarle una carta a Elliot donde explicaba todo lo sucedido en la casa de los Black, quería estar ahí para el apoyo de Cedric, pero por ahora su misión era la prioridad.

— ¡Molly! —Corrió hacía la mujer al toparsela en el pasillo. 

— Buenas tardes, cariño, ¿está todo bien? —Preguntó con una sonrisa mientras dejaba el cesto de ropa reposar en el suelo.

— Todo perfecto, gracias, simplemente quería saber si no había llegado correo para mí —Preguntó con emoción. 

— No, cariño, no ha llegado nada —Suspiro con pesadez y acaricio la mejilla de Bella— En cuanto llegue algo para tí te lo haré saber, ¿Sí?

La mujer sonrío y se alejo a paso lento, hace días que mando aquella carta, y no había obtenido respuesta alguna.

Elliot

— Es que no lo entiendes, Anne —Me quejé mientras caminaba por los pasillos de Hogwarts junto a Annelise rumbó a el patio— Desdé que Bell se fue soy un Gryffindor rodeado de Slytherins. Soy un traidor, para ellos.

— No eres un traidor, y tienes a los gemelos, Seamos, Dean y todos los demás chicos raros con los que te juntas —Las palabras de Annelise eran realmente convincentes— Hablando de Bella, ¿No se te hace raro que no haya enviado ninguna carta?

— Bastante, sí —Contesté llegando al patio y sentándome en el césped— ¿No te molesta la boina?

— La verdad es que con el tiempo se te olvida que esta ahí —Respondió Annelise con simpleza mientras se retiraba su boina dejando fuera su pelo castaño.

— ¿Tampoco te causa conflicto que todo sea azul? —Pregunté de nuevo. La verdad es que suelo causar irritación en las personas, pero no me importa, es de familia.

— No lo cre... —Anne se vio interrumpida por la repentina llegada de Blaise.

— ¡Lioty! ¿Haz sabido algo de Bella? —Era Zabini, quien venía con los chicos detrás.