"Hasta Que Mi Muerte Nos Separe" [COMPLETA✓]

🥀 Desubicada.|16°

Narrado por Julianne Ross.

Desperté con un fuerte dolor de cabeza podía sentirme aturdida y desubicada, así que miro a mis lados y me encontraba conectada a un par de tubos de oxígeno en ese mismo instante supe que la habitación en donde me encontraba no era la mía, está era aún más pequeña y oscura.

Busque con mí mirada a alguna persona en especial pero no había nadie allí, solo yo.

En ese momento la puerta es abierta y por ella entra la enfermera Roberts con un paquete en sus manos.

- Despertaste...¿Cómo te sientes?.- pregunta y me dedica una cálida sonrisa.

- Me siento algo aturdida pero he estado peor.- Le devuelvo el gesto.

- Bien... Te traje algo y posiblemente sientas confusión así que te lo explicaré.- En eso saca del paquete un hermoso vestido de novia.- Dylan quería que la boda fuera algo inolvidable así que quiso adelantarla y darte una sorpresa, y vaya sorpresa.

- ¿Casarnos? ¿aquí?.- Preguntó aún más confundida.

- No solo eso, debes ponértelo, ya están arreglando todo... Además necesitaremos mucho tiempo, no puedes hacer mucho esfuerzo. - Abrí mis ojos como platos, me iba a casar en un hospital.

- Debí decírselo, él no merece tal sufrimiento.- Rompí en llanto, cuando se enteré de que esto no sirve de nada, sufrirá.

- Julianne, no llores, se que es duro pero has que valga la pena. Él te espera no puedes dejarlo así.- Dice... Ella y el doctor eran las únicas personas que sabían sobre mí estado terminal y así seguirá siendo.

Me quedo unos minutos en silenció, hasta que recapacitó y comienzo a levantarme de la camilla con dificultad, Roberts me ayuda a ponerme el vestido y a peinarme ya que no tenía fuerzas para tal cosa.

- Te vez hermosa.- Exclama mientras se acerca a mí con un espejo en mano, me miró por este y no me veía tan mal, el vestido era largo y hermoso con unos tacones no muy altos, mí cabello con una linda tenza y en mí rostro llevaba un poco de polvos, brillo, rubor y máscara de pestañas, pero nada de eso podía hacer disimular mis enormes ojeras y mi rostro sumamente pálido.

Me sentía fatal.