Capítulo 7

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Capítulo 7


-Me imprime de Eunbin. – Si no fuera porque eran lobos, estaba seguro que no lo hubieran escuchado. La reacción de todos fue la esperada, Taehyung era el único que ya lo sabía, sobre todo porque era el que recibía los gruñidos y como marcaba a Eunbin antes de que él llegara, se le hacia una estupidez porque ella no lo sabia, pero su lobo era mas fuerte y secretamente la quería para él mismo. Namjoon y Seokjin ya lo presentían, por eso estaban mas serios de lo normal, esperando a que dijera la verdad, algo extraño en él. Hoseok, estaba feliz, soltó un silbido y aplaudió como foca, algo natural en él, Jimin y Jungkook estaban en shock volteando a ver todos en la mesa.

- Bien, ese si es una causa de fuerza mayor. – Dijo el consejero acomodado sus gafas. Los lobos se regían por normas, y la mas poderosa de ellas era el imprimarse, al hacerlo su espíritu, su alma, se enlazaba con la de la otra persona, podía ser mujer u hombre, no importaba. Era el destino el que hablaba, o el hilo rojo de la vida, que unía a las almas gemelas. El no quería depender de otra persona. Ya había saboreado la pérdida de su hermana, no quería saber lo que sentiría si perdiera a Eunbin, por eso lo mato, para protegerla y porque su única razón para vivir, desde que la encontró, era hacerla feliz. Y ya podía matar a quien fuera que le hiciera daño, la ley los protegía, sobre todo y todos.

- Si eso es todo, me largo. – Gruño y sin esperar nada más salió. Tenía cosas que hacer y después iría a verla.


°°°


El invierno se estaba acabando, Eunbin ahora usaba sus camisas a cuadros, arriba de las playeras, al final no importo cuanta ropa le compro ella siempre prefirió su ropa, y no podía estar más contesto, siempre olía a él. Le acompaño hasta la enfermería y se despidió de ella con un abrazo, y él se dirigió al centro de la reserva, donde Jimin ya lo esperaba.

Esa se había convertido en su rutina desde hacía cinco días, Eunbin había ayudado con las mujeres rescatadas, la chica más pequeña había sobrevivió y ahora estaba más fuerte, Jungkook se sentía muy apegado a ella, era quien la había sacado de su celda y cada vez que esta fuera de servicio o que tenía tiempo se pasaba por la cabaña para saludarla y pasar un tiempo con ella. El problema actual era que había tres mujeres que estaban embarazadas, dos eran de Shinwon, la ley de lobos, o la suya al menos, estaba en que la vida se respetaba, los bebes nacerían en circunstancias normales, pero al ser por violación y además al ser humanas complicaba las cosas, ese día les anunciarían a las mujeres de su situación, los riesgos, los pros y contras, aunque Yoongi pensaba que no había muchos pros en su situación, apenas estaban sanado, además que un cachorro en gestación consumía más vitaminas de la madre, y ellas al ser humanas se consideraba de riesgo, pero al final la decisión era de ellas. Eunbin se había quedado en shock cuando Seokjin se los dijo, y ella misma estaría ahí para apoyarlas cuando les dijeran la situación.

El día le había parecido agotador, camino hasta la cabaña de enfermería y espero afuera a Eunbin, no quería presenciar nada de lo que sucedía ahí. De hecho, no había entrado ahí desde el primer día que las mujeres llegaron, le recordaba tanto a Eunbin que prefería mantenerse al margen, además que no había mucho que el pudiera hacer.

Soltó el suspiro retenido cuando vio salir a Eunbin por la puerta, seguía vistiendo su camisa que le quedaba ridículamente larga, los pantalones que si eran de ella y las botas militares, sonrió sin darse cuanta y estiro la mano para que ella la tomara. Recibió apenas un susurro de su parte y caminaron de regreso a la cabaña, los veinte minutos de camino fueron en silencio, seguramente no había sido fácil para ninguna de las mujeres, así que le dio tiempo.

So far away - Reserva Borahae -  MYGDonde viven las historias. Descúbrelo ahora