2

1K 98 4
                                    

Los días pasan bastante rápido para Levi, ahora tiene más cosas, ha logrado tener por fin un kit de aseo personal. Como un cepillo de dientes, shampoo entre otras cosas.

Ha logrado encontrar una maquina para cortar y unas tijeras. Estaban sin usar y aprovechó. De todas formas eren no se daría cuenta. No sale de su habitación en las mañanas y noches. Pues ese es su horario de estudio.

Ha notado que tan ocupado mantiene el tal eren, no lo ha visto ni siquiera comer.

Ahora se encontraba dentro de su habitación, esperando pacientemente a que se fuera para salir con libertad. Podía escucharlo mover cosas, ponía música bajito para no molestarlo mientras que el se arreglaba para irse.

El sigue ahí, de vez en cuando pasando por su habitación. El busca la manera de entretenerse. Pero es inútil. No ha visto televisión en cuatro años, buscará encenderlo apenas el se vaya. Pero necesita ahora algo con que entretener su mente mientras está encerado.

Se asoma un poco, el pasillo está vacío pero eren sigue en casa. Aún lo escucha pelear por teléfono con alguien y poco le importa.

Ese alfa lo desconcierta, lleva días ahí y no se ha intentado comunicar, no le ha dirigido la palabra y eso no le preocupa pero si lo deja intranquilo. No necesita su atención pero era extraño. No quiere intervenir en su vida y eso parece ser la única respuesta.

De repente, cuando se calla escucha que suena su celular de nuevo. En cuanto contesta sigue usando su idioma. No sabía porque pero le daba curiosidad el saber con quien habla. Escucha que habla de él. Pues según su sentido común puede estar hablando con su padre.

Sabe que hablan sobre el, eso lo pone nervioso.

- Vive encerrado mientras estoy aquí, pero cuando me voy se que sale.

Oh no, lo han descubierto y eso no le agrada, al parecer es más listo de lo que parece.

- Me ha ayudado mucho. Este lugar ahora es más limpio y huele rico.

Dice, mientras escucha el sonido de las llaves callendose, abre la puerta y sin terminar su charla sale. Se anima a salir, con entusiasmo abre la puerta para ir al baño, hace lo suyo mientras se organiza un poco. Tenía planeado averiguar y explorar lo más que pueda.

Apenas sale del baño se dirige a la sala, busca alguna fruta que siempre le deja eren y un poco de agua. Llega a esta, sacando las uvas para lavarlas. Apenas se iba a devolver escucha un ruido. Algo en la habitación de eren le llama la atención. Con cuidado se acerca, intentando detectar algun ataque. Pero nunca llega.

- Ah hola.

Pega un brinco al escuchar detrás de él a eren, este no tenía una sonrisa en su rostro. Sin embargo saluda amable. Enseguida se pega a la pared, siente como palidece y eso alerta al alfa, este intenta hablar de nuevo pero así no fue visto por el omega, lo ve como un ataque. En cambio el omega no aguanta mucho, sale corriendo hasta su habitación, ocultándose de eren. Este último solo se encarga de recoger las uvas caídas antes de llevarlas a la cocina.

Sus nervios estaban alterados y su corazón brinca de miedo. Ha comenzado a sentirse ahogado y respirar de a poco. Sentía como si su corazón asustadizo se fuese a salir de su pecho.

Algo se desliza debajo de la puerta, no sabe que es pero no desea averiguarlo. No quiere salir de debajo de las cobijas.

- Ahora si me voy, había dejado un papel importante.

Dice, antes de escuchar como se cierra la puerta. El se queda inmóvil, intentando inútilmente escuchar alguna señal de compañía. Nunca llegó. Este se levanta, agarrando una uva mientras se la llevaba a la boca. Recoge lo tirado en la puerta. Al parecer era un mensaje de eren.

Corriendo De Una Obsesión [Ereri] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora