Corriendo De Una Obsesión [Ereri]

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Esa noche no desperdicie ninguna oportunidad de acurrucarlo en mi pecho, brindando de mi calor que hasta cierto punto es curativo para mi pareja, por eso debo de estar a su lado.

Pero aunque el este dormido no pude descansar mucho, en la mañana llegará erwin y me debo ir con el. Me siento nervioso y asustado, como si fuese la primera vez que fuera a acostarme con el. Pero ciertamente es algo difícil de procesar, amé mucho a erwin y ahora, después de odiarlo debo de estar de nuevo una última vez para por fin ser libre. Debo de hacerlo, así tenga un miedo incontrolable y ganas de desaparecer.

No se ni siquiera que me irá a hacer, no se si solo será sexo o quiere golpearme, de nuevo abusar de mi o encerrarme. Tengo demasiado miedo.

Pero tengo varias prioridades. No me dejo besar y menos marcar. De resto que haga conmigo lo que quiera.

Eren gruñe un poco y enseguida volteo a mirarlo, estaba esperando a que abriera los ojos, esta profundamente dormido y no deseo despertarlo. Pero de repente comienza a abrirlos despacio, adaptándose a la poca luz que hay en el cuarto. Ninguna de las luces está encendida y grisha esta dormido.

- ¿Porque estas despierto?

Me dice, su voz está adormilada y sin dudarlo me acerco para pegar su cabeza a mi pecho y hacerlo dormir de nuevo. Lo acuné como si fuera un bebé al son que acarició su cabeza y desplegó un suave aroma que lo hará dormir de nuevo. Me gusta hacer esto, me relaja hacerlo sentir tan bien y más dormirlo en las noches frías. Espero al menos conciliar el sueño un par de horas.

El sacude un poco su cabeza y hace que me separe de sus cuerpo. No entiendo que pasa pero no me quejo, grisha esta dormido y no quiero despertarlo.

-¿Que pasa?

- Recuestate.

Me dice, veo en medio de la oscuridad como me abre espacio entre sus brazos para que sea yo esta vez el que me recueste. Obedezco en un instante y me dejó caer listo para dormir. Porque me pesan los ojos y mi cuerpo se siente cansado.

Su calor comienza a llegar a mi cuerpo, justo por debajo de las cobijas, adormilandome y dejándome sin oponer resistencia. Se siente muy correcto y rico estar abrazado por la persona que amas. Me brinda seguridad.

Me acurrucó un poco para pegarme un poco más. Pero lástima que aún tenga sus cosillas rotas. Pero ahora entiendo que pronto estará bien, solo fue unas dos costillas y el resto son solo golpes, pronto nos podremos ir de aquí.

Su mano me acaricia por la espalda mientras sube despacio hasta mi cabeza, mueve sus dedos para hacerme un pequeño masaje y no aguanto más, aquel detalle me trajo más tranquilidad física de la que esperé, aún tengo moretones y músculos doliendo, no me he quejado por que se que no es grabe, pero por ahora el estar cerca de el me da una tranquilidad física y mental que me agrada demasiado. Se que estaré a salvo si ellos dos me syan cuidando, no tengo problema con dormir un poco.