A Través de La Vida

2.- Contención

Jungkook abrió sus ojos perturbado por unos extraños sonidos, al principió pensó que venía de la calle pero al tomar mayor conciencia y prestar atención, no era de la calle. Se levantó en el sillón más despierto ¿Eran arcadas? Se levantó sutilmente hasta acercarse al baño, miró la puerta de su habitación desde ahí podía ver su vacía cama.

- Ah... ¿estas bien? - preguntó al momento de tocar la puerta

- S-sí - gritó desde del otro lado apresurado para luego volver a vomitar

Jungkook no sabía qué hacer ¿Le daba privacidad? ¿Le daba agua? ¿Despertaba a su mamá? Suspiró eligiendo la segunda opción, fue a la cocina a servir un vaso de agua y volver. Tocó la puerta de nuevo, no escuchó respuesta así que apoyó la oreja en la madera, no tuvo tiempo de apartarse cuando la puerta fue abierta y casi cae encima del omega, aunque pudo mantener el equilibrio. Tenía mala cara, estaba pálido y con profundas ojeras adornando sus ojos.

- Lo siento... Te desperté

- No hay problema, toma - le tendió el vaso de agua, Jimin lo aceptó tomando un trago ya que su boca se sentía pastosa y con el horrible sabor del vómito.

- Supongo que la comida te hizo mal - comentó sin querer ofender pero Jimin lo miró mal

- No es eso - dijo con un tono tenso, para luego suspirar - No es eso... - repitió - creo que es mejor que me vaya - se dirigió al cuarto del alfa para ponerse sus tenis blancos

- No quise ofenderte, en serio - el alfa lo siguió

- No importa Jungkook, tú tienes tu opinión sobre mí como yo la tengo sobre ti, es normal - se levantó de golpe mareándose al instante, tuvo que volver a sentarse.

- No parece que estés bien...

- Estoy en la misma mierda, pero no importa - se volvió a levantar pasando por el lado del alfa en busca de su mochila - Por favor agradécele a tu mamá por todo - dijo en la puerta, sin mirarlo pues quería llorar, se había pasado la noche llorando y pensando sin llegar a ninguna conclusión - Fue muy amable y su comida estuvo deliciosa.

- Jimin lo siento, no quise decir nada que te ofenda - Se apresuró a disculparse, realmente se sentía culpable pero realmente no había motivo ¿no? el omega estaba muy sensible.

Jimin apretó sus puños con fuerza, pestañando varias veces, estaba sensible, sí, y también culpaba de ello a su embarazo.

- No... no hiciste nada - su voz se quebró - es solo otra cosa, gracias por todo - salió disparado de la casa del alfa sin poder contener más sus lágrimas, deseaba ser consolado, abrazado, que puedan ayudarlo, pero a la vez tenía miedo, se sentía tan avergonzado.

Jungkook se quedó mirando la puerta unos segundos para luego suspirar frustrado.

- Como sea, quien entiende a los mimados - trató de quitarle importancia yendo a su habitación para cambiarse, al instante sintió el aroma del omega inundar sus fosas nasales, ese olor dulzón, fresco y ácido, como frutas tropicales, lo respiró con gusto excitándose a los segundos, bajó la vista a la carpa que habían en sus pantalones rodando los ojos - Idiota alfa hormonal, solo es un omega - tomó rápidamente algo de ropa entrando al baño. Cuando salió a los cinco minutos su madre estaba por el pasillo - Bue

- ¿Viste a Jimin? - la cortó la mujer, Jungkook frunció sus labios

- Se fue hace unos minutos

- ¿Se-se-se fue?

- Dijo que te agradecía por todo y que cocinas muy rico

- P-pero ¿Cómo lo dejaste ir solo? al menos lo hubieras acompañado a la parada, sabes como es esta zona Jungkook - dijo decepcionada