Always Forever–Cults
Nota notita: Además de ser la primera vez que publico desde el celular xD, este es un nuevo Crossover. Síp, el primero fue con Wolfwalker y el de ahora es con nada más ni nada menos que mi saga favorita de libros: Warrios Cats.
Sin más, disfruten de esta nueva locura mía.
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Desde que había llegado al bosque y fue bien recibida en el Clan Luminoso, Rey pronto halló un hogar en ese nuevo lugar lleno de oportunidades. Ya no sería más una mascota al pie de los humanos, ahora podría ser una guerrera hecha y derecha que daría todo por sus nuevos amigos y compañeros.
Sin embargo, las cosas tampoco estaban saliendo como esperaba, pues, apenas se manifestó su firma en la Fuerza, el poderoso Curandero, Luke Skywalker, la tomó como su aprendiza, alejándola irremediablemente del camino guerrero hacia la curandería.
Día tras día, ayudando a su mentor y aprendiendo de él, veía de lejos el progreso de sus amigos, como estos pasaban de ser simples aprendices a luchadores capaces.
Una tarde, mientras acomodaba las hierbas medicinales, la Líder del Clan irrumpió en la guarida al verla entrar decaída a esta, con la cola a ras del suelo y las orejas gachas.
—Te noto ensimismada, joven aprendiza.
La aludida giró de inmediato, encontrándose con Leia, una gata canosa que, a pesar de la edad, seguía manteniéndose fuerte y con la cabeza en alto, enseñando así sus intensos ojos chocolate.
—Algo te preocupa —intuyó la Líder. Rey rápidamente negó.
—Estoy bien, tal vez solo necesito una buena siesta.
Lo cierto era que, en esa última luna, los enfrentamientos contra el Clan Oscuro habían sido más continuos. Estaba claro que ellos querían más parte del bosque que les correspondía. Los guerreros cada vez regresaban más heridos, causando que los curanderos estuvieran más atareados.
—Le diré a mi hermano que te dé un descanso, algún otro gato podría ayudarlo en lo tú te tomas un tiempo.
Rey lo que menos quería era un tiempo. Cada que se rendía al sueño, las pesadillas cargadas con una profecía que no entendía la acosaban, logrando únicamente que despertara igual de cansada, preguntándose siempre en silencio sobre a quien se refería.
—“Cuando la Oscuridad se alza, la Luz lo alcanza…” —le decía una voz desconocida, antes de irse y dejarla una vez más con la duda.
—¿Rey?
Volviendo en sí, se encontró de cara con Leia. Una de sus zarpas estaba sobre la suya en señal de consuelo. Tal vez ella no era curandera como su hermano, pero también sentía en la Fuerza sus emociones revueltas.
—Perdón —apartó la mirada, un tanto avergonzada. Sentía que sus ojos calaban profundo en su alma —, tal vez deba volver a ordenar aquí. A Luke no le gusta que no esté haciendo nada mientras él no está.
Leia no protestó, no encontrando que más decirle para sacarla de sus tribulaciones. Ya luego hablaría con su compañero de camada, quizás él tenía las respuestas que ella necesitaba.
