Una semana más tarde, SeungKwan corría por Spectacular Designs, preparándose para la clase de Vernon. Todo tenía que ser perfecto. Desde el día en el parque, había hecho un esfuerzo especial para calmarse y asentarse en una amistad fuerte con Vernon, pero no podía dejar de querer hacer esta presentación especial. Era la única forma en que podía mostrar a Vernon lo mucho que se preocupaba por él y no ser tan obvio. Janet entró en la oficina de SeungKwan, interrumpiendo sus pensamientos.
—¿Estás listo para los niños? —Janet jugueteó con su pulsera, un signo de su nerviosismo.
—Creo que sí. —SeungKwan entró en la sala de tecnología donde se guardaban las estaciones de trabajo y las impresoras—. Tengo que traer los ordenadores portátiles para que los niños puedan experimentar con los programas de diseño cuando termine mostrarles lo que hacemos.
Volvió a la pulsera de nuevo con un destello de las uñas pintadas de rosa.
—Todavía no entiendo por qué accediste a que un grupo de niños de siete años, venga aquí. Estoy preocupada por nuestro equipo. ¿Qué pasa si uno de los niños tiene un accidente?
SeungKwan se echó a reír, pero recuperó el control de sí mismo cuando la expresión de Janet se convirtió en amarga.
—Uh, Janet, creo que los niños utilizan el orinal a partir de los dos o tres años.
—Bueno, ¿cómo diablos voy a saberlo? No tengo hijos. —Ella echó un vistazo a la tecnología que la rodeaba. —Por la forma en que estás actuando en este momento, pienso que este equipo es tu hijo y estás preocupada por los grandes alumnos de segundo grado que van a intimidar a tu pequeño bebé. —SeungKwan le sonrió a su propia inteligencia. La sonrisa se quitó de la cara por una colleja en la parte posterior de su cabeza—. Ouch. ¿Qué carajo?
Janet sonrió dulcemente.
—El lenguaje, querido. No me gustaría que mi pequeño bebé aprendiera esas malas palabras a una edad tan tierna. Asegúrate de que los niños no rompen nada.
—No te preocupes por eso. Todo va a estar bien. — Apenas terminó la frase cuando Vernon apareció con su clase y la habitación se llenó con los murmullos excitados de veinte niños de segundo grado. Con un salto de su corazón, SeungKwan se volvió a Vernon cuya oscura cabellera estaba despeinada por el viento, dándole un aspecto desaliñado. Mientras los dos hombres se miraban a los ojos, Vernon sonrió, pero también había un atisbo de nerviosismo detrás de su mirada. Vernon había sido siempre el que tenía el control, el que tenía la manivela en cualquier situación. El ver una falla, una grieta de menor importancia en su aire de confianza, le hizo humano e incluso más adorable... si fuera era posible—. Estás aquí, — le dijo a Vernon. —¡Fantástico!
Vernon reunió a sus estudiantes a su alrededor.
— Niños y niñas, quiero que conozcáis a SeungKwan. Él es uno de mis amigos y trabaja aquí, en Spectacular Designs. Hoy vamos a aprender cómo hace los dibujos para las personas que lo contratan y cómo publica esas fotos.
Los chicos suspiraron y exclamaron y SeungKwan no podía dejar de reír. Janet, que momentos antes tenía una mueca en su rostro, se derritió a la vista de los niños.
—Voy corriendo a buscar unas galletas, —dijo. SeungKwan la miró como si hubiera perdido la cabeza. Ella levantó las manos—. ¿Qué? No me dijiste que iban a ser tan lindos.
Vernon reunió a los niños alrededor de SeungKwan y se dirigió a la clase.
—Bueno, antes de empezar, quiero preguntar si alguien aquí sabe lo que hago en mi trabajo.
Varios niños levantaron la mano. Vernon ayudó llamando a los estudiantes.
—Sean, ¿tienes una respuesta para SeungKwan?
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Meant for Each Other {VerKwan}
Fiksi PenggemarA veces, tu primer amor es el que estaba destinado a ser. Boo SeungKwan y Hansol Vernon Chwe fueron los mejores amigos de la infancia. Asistieron a la misma escuela, pasaban juntos todo su tiempo, y salían con el mismo grupo de personas. No fue sino...