Gisela: pues si pero ya quiere involucrarse más, quiere pasar más tiempo con sus hermanos y con Don Ismael
Victoria: pues entonces si no hay nada más que hacer
Pasaron las semanas y se llegó la boda de Alan, yo había estado muy ocupada ayudando con los preparativos y todavía tenía que ayudarles a estos pendejos a proteger la hacienda
Gisela: ya tienes tu vestido?
Victoria: no, se me hace que ni vestido me voy a poner, tengo que estar cuidando la hacienda
Gisela: no, tú te vas a poner vestido si o si, mira aquí tengo unos que eran míos, pero puedes agarrar el que más te guste
Victoria: segura?
Gisela: si, mira, pruébate ese rojo, se te va a ver muy bonito con tu color de piel y con tu figura
Me probé el vestido rojo, y me veía bien buena a la verga
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Victoria: no se ve muy de niña este vestido?
Gisela: no, se te ve muy bonito
Victoria: bueno pues, este mero me pongo, muchas gracias
Gisela: de nada
Me quite el vestido y me fui a mi cuarto para arreglarme, cuando termine, salí y fui a ver si todo iba bien con las mesas y los arreglos Me topé a Pablo y el wey nomas se me quedó viendo
Victoria: soy o me parezco
Pablo: y ese vestido?
Victoria: que tiene o que?
Pablo: nada, pero estás enseñando mucho
Victoria: no empieces
Pablo: a donde vas?
Victoria: a ver cómo van con las mesas y los arreglos
Pablo: todo te quedó muy bonito
Victoria: gracias
Pablo: no te recomiendo que vayas para allá, Fernando también anda viendo todo
Victoria: a mi me vale madre quien ande allá, yo voy a ir
Fui a ver qué tal estaba quedando todo
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