CAPÍTULO 8

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STEPHANIE

No sé por qué he aceptado esto.

Me miro por tercera vez al espejo. A mi pelo perfectamente ordenado, mi piel maquillada, la ropa inmaculada. Al final accedí y acepte la cita de Sam ayer.

Desconozco si acepté la cita porque sinceramente quería salir con él o la conversación de aquellas chicas en el baño fue un motivo más...

-¿Y has vuelto a ver al cantante del bar?-dice una voz femenina.

Reconozco las voces de aquellas chicas, son el séquito que siempre acompañan a Jessica y ella también está con ellas. Antes de que se den cuenta de mi presencia entro rápidamente en uno de los aseos y cierro la puerta.

Qué demonios estoy haciendo.

-No-dice una voz con un desagradable pitido, es Jessica, distinguiría esa voz  en cualquier sitio.

-Dicen que está saliendo con la chica que trae al campus-dice una de su séquito de chicas.

¿Es que Adam es famoso en todos los lados?

Ella se ríe -Pero la habéis visto, esa no sabría qué hacer con él. Esa chica es nada más que una amiga.

-Pues parecen más que amigos-dice  la misma chica.

-Amigos o no-la voz de Jessica sale esta vez con un tono más fuerte-yo conozco a Adam mejor que cualquier chica y ya sabéis a lo que me refiero.

Todas las chicas empiezan a reírse por su comentario.

Creo que voy a vomitar.

-Esa chica no es absolutamente nada-dice Jessica antes de marcharse con su séquito dejando el eco de sus tacones. Al final salgo cuando me aseguro de que no hay nadie. Me acerco al lavabo y me quedo mirando  a mi misma en el espejo.

¿Por qué no accedo a salir con Sam de una vez?

Esto debería ser una causa más para que me aleje de Adam, pero sigo acercándome a  él y cada día más. Adam parece tener bastante fama, como la tenía él....y todo lo que se parezca a esa persona que destruyó todo lo que tenía, debo alejarlo de mí.

-Muñequita, está aquí un tal Sam Scott-grita papá desde el salón.

-Ya bajo.

Me doy los últimos retoques y salgo. Necesito un cigarro ahora mismo, estoy tan inquieta y sé que no es porque Sam esté esperándome abajo, la conversación con Adam en el bar se repite en mi cabeza una y otra vez, la forma en que se marchó después...

Pienso en la oportunidad de dar unas pequeñas caladas antes de bajar, tal vez esté rompiendo el protocolo de citas-si es que lo hay- pero me da exactamente igual, rebusco entre los bolsos pero no encuentro nada.

-Genial.

Decido bajar antes de empeorar la situación. Papá está hablando con Sam animadamente, él se da cuenta de mi presencia y sonríe al verme.

-Estás preciosa- dice Sam cuando me acerco a ellos. Papá me sonríe pero es una sonrisa genuina. No le gusta lo que estoy haciendo.

-Gracias-le digo. Sam me coge de la mano, espero a sentir alguna sensación nueva como cuando Adam me toca, esa sacudida…pero no hay nada.

-Deberíamos salir ya, tengo una mesa reservada.

-Claro.

Me despido de papa y creo ver el disgusto en su mirada cuando Sam vuelve a unir nuestras manos.

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