𝕊𝕖𝕚𝕤 𝕧𝕖𝕔𝕖𝕤 𝕟𝕠 → KOOKMIN

Fly me to the moon

Capítulo 9

Fly me to the moon. 

Povs Jungkook. 

El primer sábado de febrero decidí mudarme temporalmente a la casa de Hoseok. Quería liberar mi mente y desintoxicarme de las drogas , el vodka y el whisky. 

No más alcohol, no más LSD, no más Jimin. No más Jimin y yo cocinando juntos, no más Jimin y yo jugando con los gatos durante toda la madrugada... no más sexo irresponsable sobre cualquier lugar de la casa.

En la casa de mi amigo jugué Blackjack hasta el cansancio, junto a Jaehyun, Chanyeol y Yunho. Solamente abandoné la mesa principal de Hoseok cuando Taehyung vino por mí.

Lo llevé a la habitación, lo desnudé sin decir ni una palabra, pero él parecía estar de acuerdo, porque ya estaba echado en la cama antes de terminar de desabrochar mi camisa. Le practique sexo oral durante un buen rato, a diferencia de Jimin que no solía dejarme bajar de esa forma.

Jimin no era un fanático de dejarse mimar de aquella manera, todo lo contrario, él solía ser el primero en arrodillarse e incluso prepararse a él mismo mientras lo hacía. Luego todo era rápido, y terminaba conmigo clavado en su interior hasta que ambos nos quitábamos el aire. Era algo tan simple pero a la vez complejo, como nuestros cuerpos se unían, como conocíamos el punto justo del otro. 

No quería pensar en Jimin, mucho menos compararlos... Taehyung era un excelente amante y yo estaba seguro de que él me había amado, así como yo lo amé a él. Mi vida podía volverse un poco más fácil y tranquila si tan solo mis impulsos no me llevaran siempre a la cama de otro hombre. Me gustaba pensar, al final del día, que mi obsesión por Jimin solo era puro morbo, la adrenalina de saber que seríamos juzgados en caso de ser descubiertos. Pero los días pasaban y cada vez me convencía más de que aquello era una mentira. La necesidad por él comenzaba a sentirse como una pequeña enfermedad que crecía desde lo más profundo de mi pecho... y recorría mi cuerpo con agilidad, mediante mis venas, mis huesos y mi piel.

Todo este planteo inundó mi mente mientras me follaba a Taehyung. Estaba encaprichado y hecho un idiota. Me odiaba tanto por eso. No era justo para ninguno de los dos, pero no sabía como detener la gigante bola de nieve que se había armado, donde cada uno de nosotros tenía un papel fundamental y más injusto que el anterior. 

Sin embargo, Taehyung no lo notó. Cuando se corrió sobre la cama, conmigo dentro, pude escucharlo gritar mi nombre y no, no se sintió tan placentero como en otras ocasiones.

Lo follé para despejar esos pensamientos. Me enterré en él hasta saciar mi sed. Cuando me vine dentro del condón - porque solo me permitía hacerlo sin condón con Jimin - sentí que no merecía ningún orgasmo más de este hombre. Porque yo era un hijo de puta, que pensaba en otro mientras lo poseía a él.

Taehyung era mí ex, no era un desconocido, y yo, a pesar de nuestras peleas en Estados Unidos, de la supuesta traición y los engaños, aún lo quería.

Nos despedimos luego de cenar, encendí un cigarrillo y pensé en cuantas opciones tenía para explicarle como me sentía sin parecer un jodido egoísta. No tenía opciones, todas me dejaban a mí como un hijo de puta y a él con el corazón destrozado. ¿Estaba siendo soberbio al creer que este hombre maravilloso aún me amaba?

"Siento que no volverás a llamarme" - susurró, mientras tomaba uno de sus cigarrillos y lo encendía.  

"Nunca fui bueno con las palabras" - me sinceré.