truth is

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Capítulo 17

Truth is

Povs Jungkook

Aún tenía sangre en las venas, por eso mi mente recordaba el día en que nos conocimos a la perfección. Sin ningún tipo de sentido y seguridad, corrí a Akuma esa misma noche.

Eran las 4 de la mañana, justo cuando el turno de Jimin finalizaba, y si ya no aceptaba privados, solo era cuestión de tiempo para verlo salir por la puerta de atrás.

Fumé uno, dos cigarrillos. Cuando estuve a punto de encender el tercero, la silueta de una de joven apareció, Seulgi, y detrás de ella Irene, aún con sus tacones y el excesivo brillo que las caracterizaba en el rostro.

"Es el chico de Mimi" - Irene me señaló sin vergüenza. Sentí inexplicable ternura al escucharla decir Mimi y al considerarme su chico.

Quería llamarlo así cuando lo arropaba luego de tener sexo, cuando consentía sus caprichos y le servía leche de coco a las 6 de la mañana.

"Cierra la boca Irene" - Seulgi codeó a su amiga sin disimulo y volvió su mirada a mi - "¿Sabes que puedes tener problemas por estar aquí?" - me habló, saltándose las cordialidades.

"Si, pero no me importa. Solo quiero hablar con él"

"Pues él no quiere hablar contigo" - me cortó en seco, pero su mirada estaba llena de pena, pidiendo ayudar a gritos pero en silencio.

"¿Está aquí?"

Asintió con la cabeza y de inmediato, un lúcido y cansado Jimin apareció por la puerta.

"Demasiado sobrio para ser un Jeon"

Jimin tenía razón, estábamos condenados por nuestro estilo de vida y adicciones.

Tenía sus botas clásicas y el tapado blanco que tantas cosas me hacía recordar. Su maquillaje era mayor aquella noche, y solo pude pensar en que fue su elección, para tapar sus ojeras o tal vez algunas heridas. Rogaba porque fuera lo primero y que Namjoon no haya puesto sus manos sobre él otra vez.

"Necesito hablar contigo" - le hablé y frunció el ceño. No sabía si estaba nervioso o enojado - "¿Haz estado bien?"

"Si. ¿Y tú?" - me respondió, y lo obligué a caminar conmigo hacia el callejón más cercano detrás del club. Se despidió de sus amigas solo con un gesto - "van a robarnos aquí"

"No tengo nada de valor conmigo..."

"Pues yo si. Acabo de cobrar dinero por una excelente noche"

Lo miré con desconfianza. Yo sabía que su noche no había sido tan grandiosa, porque conocía sus horarios y no aceptó ningún privado que le dejara dinero extra.

A pesar de su negativa llegamos a aquel pequeño callejón. No quería que nadie más nos viera y que nadie tuviera el placer de oír lo que yo tenía para decir.

Jimin se recostó sobre la pared más cercana, manchó su tapado e hizo sonar sus tacones. Tragué hondo al sentir su proximidad... lo había extrañado tanto, lo había necesitado. ¿Pero como podía plasmar eso en palabras sin quedar como un idiota?

Me había enamorado de la persona que menos tendría que haber amado. Pero la vida era cruel e irónica, dejándome sin aliento y con un dolor en el pecho imposible de borrar.

𝕊𝕖𝕚𝕤 𝕧𝕖𝕔𝕖𝕤 𝕟𝕠 → KOOKMIN Donde viven las historias. Descúbrelo ahora