Capítulo 01

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Entre Dos Montañas 


Emily Evanson: 

5 años, 5 malditos años han pasado desde que lo vi y 5 jodidos años sin saber nada de él. Seguro que se ha olvidado de mi y me jode muchísimo aunque sé que me lo merezco. Estuve todo el primer año sin dormir por las noches por culpa del insomnio que tenía, al cabo del tiempo me aficioné al boxeo para descargar mi rabia hasta que un saco no fue suficiente para mi y la pagué con la gente de la manada, amenazando a cada uno de ellos. 

En estos cuatro años no he estado con ningún chico porque no he podido pero si he echado algún que otro polvo con ellos y ni siquiera en ese momento podía olvidarme de él.

Hace cinco años era una niña completamente ilusa pensando que tendría una historia de hadas perfecta con... con Aaron, si, ni siquiera puedo nombrarlo del daño que eso me causa seguro que a estas alturas debe odiarme y cinco años después soy el alfa de la manada. Exacto, el alfa de la manada desde hace un par de años o algo así. 

No pude contenerme y en un pelea de muchas empujé a la alfa de aquel momento y se dio con la nuca en la punta afilada de una mesa de cristal que tenía justo detrás, se podría decir que no fue intencionado pero la verdad es que yo vi esa mesa y fui yo quien la empujó en esa dirección pero no me arrepiento porque ahora soy superior a los demás y puedo mandarlos.

 —Nos falta alimento Emily 

Dice Tamara, mi ayudante y la que siempre me informa de todo.

—¿Mucho? 

Dime por favor que nos queda al menos comida para un mes, por favor.

—No hay nada.

Mierda.

Me temía que pasara esto, estamos teniendo problemas con los humanos y por un tiempo lo más seguro es no ir a la ciudad por culpa de otra manada que no tomó las precauciones necesarias y un equipo de policías detectives descubrió un cuerpo con mordeduras de hombre lobo y lo están investigando.

—¿Que hacemos ahora?

Le pregunto en busca de ayuda.

—Hay una manada a unos cuantos metros de aquí pero no tan lejos como las demás, supongo que deben tener comida podríamos robarles.

La manada donde está Aaron ... O al menos donde antes estaba, ya no se nada de él.

—¿Te parece?

Si no nos queda otra opción...

—Si 

Afirmo firmemente.

Asiente con la cabeza y se va de la tienda de campaña.

Esto es tan extraño, mi vida ha cambiado tanto en tan poco tiempo, para mi fue ayer cuando dejé a Aaron atrás llorando.

Cuando Tamara me avisa de que ya ha mandado a alguien en busca de comida cojo el móvil y marco a Abby, normalmente cada mes nos llamamos pero este mes ninguna de las dos ha dado el paso.

—¿Si? 

Se escucha en el otro lado del teléfono 

—¿Abby?

—¿Emily?

—¡Si!

Exclamo intentando parecer alegre.

—¡Hola! 

De hecho echaba de menos su voz 

—¡Cuanto tiempo!

Desde Mi Montaña © [Completa✔️]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora