Capítulo 010

91 11 10
                                    


No he revisado el capítulo, espero que esté todo correcto:)


Emily Evanson 

Después de que Abby me contara que hizo lo que hizo con Aaron, hasta me duele imaginarlo, me invente cualquier excusa para estar sola. Necesitaba pensar, ni siquiera fui al bar cuando Bruno me lo pidió supongo que su cotilleo puede esperar. Me fui hacia mi casa con la intención de ordenarla de nuevo pero al ver todo tan destrozado me dio tanta pereza que no lo hice.

Entré con cuidado, vigilando no caerme y entré en mi habitación. La cama seguía igual que cuando la abandoné a Aaron estando ahí dormido, mis ojos enseguida se humedecieron inmediatamente. Mientras intentaba reprimir mis lágrimas me acerqué al armario para coger un bikini, me apetecía meterme en el jacuzzi para matar el tiempo cuando me detuve de inmediato al escuchar una voz.

—¿Que haces aquí?

Esa voz sabía de quien era, para no saberlo. 

—La pregunta es que haces en mi casa 

Dije esta vez 

No entendía porque Aaron estaba en mi casa, con que necesidad. ¿Lo hacía a menudo esto? 

En seguida me acorde de que tenía los ojos con una lagrima apunto de salir, mierda seguro que él ya la ha visto. Me lleve la mano a los ojos como si me picaran intentando disimularlo para secármelos.

—Ya los he visto 

Dijo con mucha frialdad, odiaba a este Aaron. ¿Ni siquiera me iba a preguntar?

—No has contestado a mi pregunta 

Dije para cambiar de tema 

—Ni tú a la mía — bajo su mirada a mis manos y vio el biquini — anda, si vas a recrear escenas.

Dijo intentando ponerle emoción 

—Vas al sitio el cual yo te enseñé, te quedas mirando la cama donde pensaste en dejarme durmiendo, ahora quieres ir al jacuzzi. ¿Que será lo siguiente?

No se que sería lo siguiente pero se que lo echaba de menos, así que lo siguiente será intentar recuperarlo.

—¿Recrear otra vez cuando te largaste? 

Está muy dolido, puedo verlo en su ojos cuando habla del tema sin embargo es él quien lo saca una y otra vez.

 —Aaron yo ... 

—¿Tu que? 

Su tono de voz era tan frío que te congelaba

—Quiero recuperarte, dame otra oportunidad 

Al escuchar eso salir de mi boca enseguida me miró fijamente a los ojos, pude ver en los suyos que mostraban esperanza y un poco de alegria pero desapareció al instante.

—No 

Eso me molestó más de lo que debería 

—Eres muy injusto, yo te di una segunda y tercera oportunidad y tú ni siquiera me das una. 

Eso hizo que se quedara muy pensativo, él sabía que yo llevaba razón. Ambos lo sabíamos.

—Tu y tú manada podéis quedaros el tiempo que haga falta 

No me imaginaba que fuese a decir eso pero me alegraba de oírlo, me quitaba un peso de encima.

—No me refería a este tipo de oportunidad pero gracias igualmente.

Desde Mi Montaña © [Completa✔️]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora