Desde Mi Montaña © [Completa✔️]

Capítulo 20

Está apunto de acabarse el libro :( disfrutad de esta primera parte 

La luz que entraba por la ventana del techo hizo que me despertara y lo primero que hice fue mirar a Aaron pero no estaba.

Mis ojos empezaron a humedecerse sólo de pensar que dentro de unos días esto seria cada día, levantarme y no verlo, hacer mi vida sin él.

Me he acostumbrado a estar con él y odio dejar de hacer las cosas que me gustan o dejar de ver a personas que... que me gustan.

Me tapo con las sábanas en seguida al ver que entra dentro de la habitación y empiezo a pestañear rápido para que se vayan las lágrimas de mis ojos.

—God morgen kjære!

¿Porque me habla en noruego? si yo no lo entiendo

Se acerca a mi con un plato de churros con chocolate y dándome un suave beso en la frente.

¡Para!  Así no me ayudas.

¿Como carajos me voy a poder separar de él? 

Quizás no lo acabas haciendo

Cuando deja el plato encima de mis piernas tapadas con la sabana él se coloca a mi lado, sin pensarlo le cogí del cuello y lo atraje hacia mi estampando mis labios contra los suyos apasionadamente.

Empezamos a comernos los churros pero no como personas normales, nos pusimos unas vendas en los ojos y los churros que yo cogía tenía que bañarlos en chocolate e intentar llegar hacia su boca y lo mismo conmigo.

—¡Aay! 

Grite al sentir el chocolate caliente en mi pecho.

—Perdón

Dijo riendo.

En esa habitación solo se escuchaban nuestras risas y quejas por no encontrar la boca con los churros.

Nos quitamos cada uno su venda al acabárnoslo todo, empecé a reír fuertemente al ver como había dejado su cara llena de chocolate y él hizo lo mismo.

Aaron se limitó a sonreír y se acercó a mi pecho pasando su lengua para quitarme el chocolate, mi piel se ruborizó y mis mejillas se calentaron.

—Que dulce estas 

Dice riendo

—¿Has visto?

Digo esta vez yo riendo

—¿Te gustan las personas sinceras y directas?

—¿A que viene esto?

Pregunté confusa

—¿Si o no?

—Si.. Si Claro —afirmé a la vez con mi cabeza.

Nos quedamos un rato en silencio, un silencio cómodo, yo estaba esperando que dijera algo y él parecía estar ordenado su mente.

—¿A que venia esa ...

—Creo que me gustas 

Mierda, no y no! Necesito que me diga que me odia o cualquier cosa para alejarme de él.

—¿Que?

—Me estoy enamorando de ti

¡Joder! 

—Te había escuchado la primera vez

Digo intentando sonar calmada y respirar lentamente.

Necesito alejarlo de mi pero no puedo.