Enamorando a un corazón - Juan Pablo Villamil

.39. FINAL . segunda temporada

Detuve el auto y por unos instantes me quedé quieto. No sabía si salir de ahí o quizás volver por donde vine. Sentí que apretaban mi hombro y volteando vi a Lena con una sonrisa de apoyo. Intente hacerlo también pero aun no sabía cómo afrontar que hacia más de un año que no aparecía.

- Estoy aquí – susurro, sentí su respiración cerca de mí – si no quieres, podemos volver otro día

- No – negué rápidamente – solo tengo miedo de que ella

- Lo sé, mi amor – la observe de reojo – pero la necesitas y la extrañas, con valen te acompañaremos

Asentí levemente y ella termino por besar mis labios para luego bajarse del auto. Suspire cerrando mis ojos y me mentalice que era momento de verla. Baje para ayudar a Lena a bajar a Valentín, quien dormía plácidamente en su sillita.

Al ingresar a la gran casa busque con la mirada a Eugenia y al verla, eleve mi mano en forma de saludo. Ella simplemente relajo sus facciones y con sorpresa se acercó a mí.

- Juan pablo – me abrazo con fuerza – que bueno es volver a verte

- a mi también me gusta verte, Eugenia – sonreí levemente – lamento no haber podido venir mucho antes

- no debes de disculparte, alguien la cuido por ti mientras estabas en tus asuntos

llevo su vista hacia Lena quien estaba tras de mi con Valentín el cochecito. Ella solo sonrió con tranquilidad y había entendido tantas cosas con su mirada.

- ¿quieres verla?

Volví a observar a Eugenia y asentí con lentitud. Camine tras ella y cuando estuvimos en el gran jardín comencé a sentirme nervioso, ¿me recordaría? ¿estaría lucida? ¿hablaría? No sabía con qué podía salir. Me quede estático, unos pasos alejado cuando Eugenia se acercó a ella, aún mantenía esa fascinación por las flores amarillas al igual que Lena.

Sentí una mano en mi espalda y llevando mi vista al costado vi a Lena que me observaba con ánimos.

- Ve tranquilo, mi amor – susurro – nosotros estaremos aquí

- ¿pueden venir conmigo? – pregunte con miedo

Ella hizo una mueca de sonrisa y asintió para luego caminar junto a mi hacia mi madre. Tome asiento a su lado, ella aún mantenía su vista en las flores. Me relamí los labios, mis latidos eran tan seguidos, acelerados que pensé que saldría de mí. Estaba nervioso.

- Mama – susurre

Ella volteo a verme y sonrió. Quería llorar por verla tan bien, parecía que el tiempo no pasaba con ella, pero si con su cabeza.

- Hola juan pablo. Has vuelto

Acaricio mi mejilla con lentitud, sentí como ese cosquilleo de lágrimas comenzaba a recorrerme el cuerpo. Me recordaba.

- ¿Cómo estás? – pregunte intentando contenerme

- Muy bien ¿y tú? ¿Cómo has estado? – hablo animada - ¿has comido bien? Te noto un poco flaco

- Si, mama – asentí con una sonrisa – estoy comiendo muy bien y me encuentro muy bien, de hecho – lleve mi vista hacia Lena que tenía a Valentín en brazos esta vez – debo presentarle a alguien, en realidad a dos personas muy importantes para mi

Estiré mi brazo hacia ella y sentí tomar mi mano para acercarse a mí. Tomo asiento a mi lado, la observé con una sonrisa y luego volví a mi madre quien tenía el rostro lleno de curiosidad.